El técnico de sonido del viral antitaurino: "Es una bestialidad, que lo soporte el que pueda"

El técnico de sonido del viral antitaurino: "Es una bestialidad, que lo soporte el que pueda"

GTRES

Salió de la plaza con la camiseta llena de sangre tras una de las jornadas de trabajo más duras que recuerda. Entre lágrimas, se acercó a un contenedor y arrojó la prenda ensangrentada, diciéndose a sí mismo "esto es una bestialidad y que lo soporte el que pueda".

Ese mismo día, Jose Sepúlveda, por aquel entonces técnico de sonido en Canal Nou, habló con su superior y decidió que nunca más cubriría una corrida de toros.

De aquella tarde en Castellón ha pasado una década o quizás menos, ya que Sepúlveda no recuerda bien si fue en 1995 o en 1997 el último día en el que asomó su micrófono por el callejón buscando el sonido del toro desangrándose a pocos metros de distancia.

Pese al tiempo transcurrido desde que lo dejó, Sepúlveda quiso recordar su nefasta experiencia tras leer La memoria del llanto, un artículo contra los toros del periodista y escritor Francesc González Ledesma, publicado en el diario El País en marzo de 2010.

Lo hizo en Facebook con un comentario que replicó Anonymous Defensa Animal España y que se ha convertido en todo un fenómeno viral compartido más de 60.000 veces.

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TESTIMONIO REAL: Palabras de un técnico de sonido de televisión que hacía las retransmisiones de toros..."En mi caso,...

"CUANDO ESTÁS ALLÍ, ESCUCHAS LA REALIDAD"

"Yo quería recordar la realidad de lo que ocurre, no de lo que se vive en la unidad móvil. No me molesta que se haya hecho viral si con esto consigo que la gente se conciencie de que las cosas son así", explica en declaraciones a El Huffington Post.

Sepúlveda asegura no ser el único que ha vivido experiencias así y que algunos de sus compañeros también decidieron dejar de cubrir este tipo de espectáculos. "Uno me decía que le llegaron a sacar mareado del callejón", indica.

Según el técnico, lo que se observa en televisión dista mucho de lo que se vive en la plaza. "El micrófono está bajito, se suben los audios del público y de la música, y te dicen que no grabes planos cercanos. Así la gente no ve la tortura que existe porque hay que pintarlo bonito. Pero el toro tiende a morir buscando la barrera y, cuando estás en el callejón y te avisan para que te acerques, por el auricular escuchas la realidad", asegura.

Tras renunciar a seguir cubriendo corridas de toros, Sepúlveda siguió trabajando en la televisión pública valenciana hasta su cierre y ahora se dedica a trabajar en postproducción de sonido para otras televisiones regionales. Desde la distancia, observa las corridas como "un espectáculo dantesco" que compara a "meterse en un matadero". "La diferencia es que es una fiesta nacional, pero no es tan bonito".

Por eso considera que no debería permitirse su retransmisión porque, recuerda, "se hacen en horario infantil". Si eso ocurriera, quizás ningún profesional viviría la experiencia que decidió relatar en Facebook y que, como reconoce, le ha otorgado su "minuto de gloria".