El Senado destituye a Rousseff y confirma a Temer como presidente de Brasil

El Senado destituye a Rousseff y confirma a Temer como presidente de Brasil

REUTERS

El Senado de Brasil ha aprobado este miércoles la destitución definitiva de Dilma Rousseff como presidenta del país, poniendo así fin a más de una década de gobierno del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT). Sin embargo, ha rechazado la pena de inhabilitación propuesta contra la ya ex presidenta, que le habría impedido ejercer cargos públicos durante los próximos ocho años.

Un total de 61 senadores han votado a favor del cese permanente de Rousseff, es decir, más de los 54 que eran necesarios como mínimo para que el proceso de impeachment triunfara. Solo 20 han mostrado su apoyo a la ya ex presidenta. Rousseff ha sido declarada "culpable" de un "crimen de responsabilidad" en el que incurrió al ordenar un aumento del gasto público en plena campaña para su reelección, en 2014, sin la necesaria autorización del Congreso.

Tras la votación que ha certificado su destitución, Dilma Rousseff, ha afirmado: "Han procesado a una persona inocente y han llevado a cabo un golpe de estado parlamentario". "Volveremos", afirmó, rodeada de partidarios, frente al Senado en el que acababa de llevarse a cabo la votación, tal y como recoge AFP.

Por otro lado, han sido 42 senadores los que han votado a favor de la inhabilitación de Rousseff, 12 menos del mínimo de 54 que se necesitaba para apartar a la líder izquierdista de la vida pública brasileña durante un tiempo, según informa la prensa local. Rouseff ha logrado librarse de esta pena accesoria porque el presidente del Tribunal Federal, Ricardo Lewandowski, que ha sido quien ha dirigido el "impeachment".

El hasta ahora presidente interino, Michel Temer, asumirá de forma indefinida las riendas del gigante suramericano, con la posibilidad en el horizonte de que se convoquen elecciones anticipadas, tan solo dos años después de la reelección de Rousseff.

Este martes, el diario local Estadao reveló que la defensa de Rousseff estaba preparando un recurso para presentar ante el Tribunal Supremo en caso de que la cámara alta decidiera apartarla definitivamente del cargo. La líder brasileña, que el lunes pasado intervino para pronunciar su alegato de defensa, sostiene que es inocente y que el 'impeachment' es fruto de una 'venganza política' de quienes no lograron llegar al poder mediante las urnas.