UNICEF asegura que hay 9.700 niños desplazados por la batalla de Mosul

UNICEF asegura que hay 9.700 niños desplazados por la batalla de Mosul

Reuters

La batalla por Mosul ha provocado ya el desplazamiento de 9.700 niños. Así lo ha asegurado este jueves el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en un informe en el que señala que desde el comienzo de los combates para arrebatar la ciudad iraquí al autodenominado Estado Islámico han abandonado la zona 20.700 personas.

"He conocido a madres e hijos que estaban tan aliviados de haber salido vivos; era evidente que habían sufrido tanto", ha señalado Pernille Ironside, jefa de operaciones de UNICEF en Irak. La organización ha asegurado que los niños llegan "cubiertos de polvo, agotados e inseguros sobre lo que les va a pasar después".

El gobierno local, apoyado por personal de UNICEF, se encarga de proveer de agua y alimentos a las familias. Un equipo de cuatro personas se encarga después de vacunar contra la polio y el sarampión a los niños de entre 6 meses y 15 años de edad. "Para muchos, esta ha sido la primera vacuna que reciben en dos años", asegura UNICEF.

LA VIDA TRAS EL HORROR

Las familias solo pueden permanecer medio día en el primer punto de control. Desde allí, y tras los primeros procedimientos de urgencia, son trasladados a un campamento de emergencia donde se les asigna un albergue. En esos puntos de destino, UNICEF trata de velar porque haya agua potable, duchas y letrinas. Un equipo móvil ofrece también atención psicosocial a los niños.

El siguiente objetivo es crear espacios temporales de enseñanza y juego para los niños. “Mientras la situación continua extendiéndose, es importante que sigamos siendo muy ágiles y que adaptemos nuestra respuesta de forma que podamos ofrecer el mejor apoyo posible a las familias y niños que ya han sufrido tanto en estos últimos años”, ha aseverado Ironside.

La ONU calcula que hasta un millón de personas podría buscar refugio como consecuencia de la ofensiva de Mosul, que ya ha alcanzado los barrios orientales de esta localidad, el principal feudo del grupo Estado Islámico en Irak.

UNA OPERACIÓN CRUCIAL

La huida de la zona en conflicto es la peor de las consecuencias de una operación crucial para la coalición militar que trata de arrebatarle a Estado Islámico todo el territorio que controla en Irak. La toma de Mosul, la mayor ciudad bajo control de los yihadistas, tiene una envergadura que no se había visto desde que los estadounidenses invadieran el país, en 2003.

La que se vive en estos momentos es la primera fase de las varias fases en las que se ha dividido el movimiento. Tras el cerco de la ciudad por todos los frentes salvo por el que da al desierto, los tropas del Ejército iraquí entrenadas por el ejército de los Estados Unidos avanzan sobre la ciudad y se enfrentan a la red de túneles cavada por los milicianos de Estados Islámico, a la quema de pozos petrolíferos y a la utilización de civiles como escudos humanos.

Aunque despacio, la ofensiva de las tropas iraquíes, que cuentan con el apoyo aéreo de Estados Unidos, Reino Unido y Francia, avanza. Hace solo unos días, un grupo de las fuerzas especiales logró hacerse con el control de una estación local de televisión. Era la primera vez en dos años que los soldados del país ponían un pie en la ciudad.