Roberto Santiago se lo apuesta todo con 'Ana'

Roberto Santiago se lo apuesta todo con 'Ana'

AGENCIA DOSPASSOS

Roberto Santiago (Madrid, 1968) encaja a la perfección con el término 'hombre orquesta'. Escribe libros infantiles, guiones de películas, ha dirigido el filme El penalti más largo del mundo y ahora da el salto a la literatura para adultos con Ana, un thriller sobre el mundo de las adicciones en general y la ludopatía en particular.

Autor de la celebradísima saga juvenil Futbolísimos —de la que se han vendido un millón de ejemplares—, Santiago aspira junto con su editorial, Planeta, a convertirse en un best-seller: la novela sale al mercado con una primera edición de 30.000 ejemplares y varios países europeos —Francia, Polonia o Chequia— han comprado los derechos para su traducción.

La historia relata un año y medio en la vida de Ana Tramel, una penalista de éxito de 43 años que, con el paso del tiempo, acaba ahogando sus penas en un mediocre bufete a golpe de whisky. Cada lingotazo la hunde más en un pozo profundo del que se ve obligada a salir para defender a su hermano, acusado de asesinato. “Es la historia de David contra Goliat. Ana es adicta a todo, está rodeada de perdedores y se enfrenta a una gran corporación de la industria del juego”, relata el autor, quien califica Ana de “novela de personajes más que de trama”.

Una trama cuya construcción obligó a Santiago a pasar cuatro años apostando para conocer de primera mano el escenario de su historia. De hecho, reconoce que, por mucho que se venda la obra, no será capaz de recuperar todo el dinero que invirtió en casas de apuestas. Nada de lo que relata, asegura, es inventado: “Lo digo con humildad pero con la cabeza alta: todo lo que se cuenta sobre el mundo del juego es absolutamente real, como nunca se había contado antes en ningún libro”.

Siendo como es pura ficción, lo que se cuenta en Ana se nutre de “muchos casos reales y personas reales que he conocido y a las que he cambiado el nombre". Lo que vio Santiago en esos cuatro años de inmersión en el mundo del juego le puso “los puntos de punta”, lo que unido a que en España hay, según sus datos, un millón de ludópatas, le lleva a plantearse por qué aún no se hace nada para combatir esa lacra. Sobre todo a la hora de regular anuncios de apuestas deportivas que bombardean cualquier retransmisión deportiva.

El sórdido mundo de la ludopatía se nutre muchas veces de la obsesión, esa que lleva representando Ana para Roberto Santiago desde que se le apareció por primera vez hace más de 30 años. “Llevo escribiendo notas sobre ella mucho tiempo”, reconoce.

Pero no fue hasta hace dos años cuando supo que tenía que protagonizar su primera novela para adultos. Fue entonces cuando se puso a escribir “de forma compulsiva” las más de 864 páginas del libro, una tarea que le llevó 18 meses “de escritura con las tripas”.

Ahora Ana es ya papel, aunque le queda un largo camino por recorrer. Santiago reconoce que, con casi toda seguridad, su historia acabará convertida en imagen, ya sea en película o en serie. Una opción que no se planteó en ningún momento del proceso creativo: “Para mí Ana es 100% novela, un artefacto narrativo”. Pero vaya donde vaya, Santiago quiere “acompañarla en los caminos que emprenda”. Que puede ser, por qué no, una continuación en un segundo libro.

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