El PSOE apuesta por poner fin a la prostitución en dos años

El PSOE apuesta por poner fin a la prostitución en dos años

En su intención de renovar el Pacto de Estado contra la violencia de género.

Imagen de un prostíbulo.Reuters

El PSOE ha apostado por renovar el Pacto de Estado contra la violencia de género, que cumple este martes cuatro años de su aprobación en el Congreso, y ha subrayado la necesidad de abarcar las distintas manifestaciones de la violencia machista, poniendo fin a la prostitución en esta legislatura.

“El PSOE es abolicionista y ésta debería ser la legislatura que pusiera fin a la trata y a la prostitución. Sin prostitución, no hay trata”, ha manifestado la portavoz adjunta del grupo socialista y secretaria ejecutiva del PSOE contra la violencia de Género, Susana Ros, al inaugurar unas jornadas sobre el Pacto de Estado en el Congreso.

Ros ha enmarcado la explotación sexual y el tráfico de mujeres en la violencia de género y ha asegurado que no son mujeres y niñas prostitutas, “son prostituidas”: “La igualdad entre hombres y mujeres es inalcanzable mientras se compre y se venda a seres humanos”, ha recalcado.

La portavoz adjunta, que ha subrayado también la necesidad de mejorar la atención a las víctimas de la violencia de género en el mundo rural, a las mujeres mayores y a aquellas con discapacidad, ha cargado además contra el discurso negacionista de la ultraderecha, “una nueva forma de fascismo”, según ha apuntado.

En ese contexto, la responsable de Igualdad del PSOE y exvicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha ratificado la apuesta del partido por el Pacto de Estado contra la violencia de género y por una ley contra la trata y la prostitución en la que, ha insistido, ya trabajan los socialistas.

A su juicio, esos deben ser los dos “combates” de las socialistas feministas: “No podemos seguir hablando de la prostitución como una profesión, ni seguir respondiendo a cada asesinato como si no hubiera instrumentos del Estado para reaccionar”, ha manifestado Calvo marcando distancias frente a sectores feministas que reclaman regular los derechos laborales de las mujeres que ejercen la prostitución.