La responsable del Instituto Carlos III lanza esta recomendación de cara a la Navidad

La responsable del Instituto Carlos III lanza esta recomendación de cara a la Navidad

"Quizás tengamos que ser creativos", dice Raquel Yotti.

People with gifts wearing facemasks during coronavirus and flu outbreak on Christmas. Virus and illness protection, home quarantine. COVID-2019Choreograph via Getty Images

Raquel Yotti, directora del Instituto de Salud Carlos III, ha concedido una entrevista a la Agencia EFE donde ha lanzado una recomendación de cara a la Navidad en plena pandemia de coronavirus.

A la pregunta de si teme que las Navidades se conviertan en el origen de una tercera ola (o una cuarta, como dice Margarita del Val), Yotti asegura que “la biología del virus va a ser la misma en Navidad” y que “sus vías de transmisión también”.

Aun así, reconoce que “a lo largo de este año ha habido muchas familias que han perdido familiares, y especialmente los más vulnerables han estado sometidos a situaciones de aislamiento y de soledad, y el reencontrarse con sus seres queridos lo viven como una necesidad”.

Yotti se hace la siguiente pregunta: ”¿Cómo podemos compaginar este virus con la necesidad, incluso por salud y por salud mental, que tienen muchas familias para reencontrarse?”.

Su respuesta es la siguiente: “Quizás tengamos que ser creativos, no deberían ser unas Navidades como otras pero hay formas de encontrarnos intentando minimizar los riesgos”.

“No se va a proponer a nadie una vacuna que no sea segura”

Esta es la recomendación que hace la experta de cara a la Navidad: “Que la movilidad se reduzca a lo mínimo indispensable; la palabra indispensable hay que reflexionarla en el marco de las recomendaciones de las autoridades y en el de la estructura de cada familia”.

Yotti también se pronuncia sobre el porcentaje de españoles (apenas un tercio) que se quiere vacunar y asegura con rotundidad que “no se va a proponer a nadie una vacuna que no sea segura”.

La experta se queja de que “ha habido mucho ruido que llega a las casas de mucha gente, también de los más vulnerables”. “Esto me preocupa porque es posible que tengamos dentro de muy poco una vacuna cuyos datos preliminares de eficacia son muy altos y que, tras pasar todos los filtros regulatorios correspondientes, se les pueda ofrecer a estas personas, y por falta de información o por un miedo creado en relación a la seguridad no quieran ponérsela”.

Por ello, lanza este mensaje: “Las vacunas son seguras. Hay que confiar en los profesionales que trabajan en las agencias regulatorias, que son independientes de los gobiernos y de otras presiones”.