¿El dinero da la felicidad?

¿El dinero da la felicidad?

nattan23

Todos hemos escuchado en alguna ocasión aquello de que "el dinero no da la felicidad, pero ayuda". Lo cierto es que en los últimos años se han realizado algunas investigaciones para descubrir si realmente los ingresos influyen en los niveles de bienestar de las personas.

Jebb A. y colaboradores, en un estudio publicado en el 2018, intentaron medir el nivel de bienestar de 1,7 millones de personas alrededor del mundo en función de sus ingresos anuales. Según afirman los autores, hay un punto óptimo de ingresos que hace feliz a un individuo. Por debajo y por encima de este punto, el bienestar, no solo es que deje de incrementar, sino que cae. Este punto óptimo varía según la región del mundo que estudiaban.

La media en dólares americanos del punto en el que el bienestar deja de subir y se mantiene estable está entre los 60.000 y los 70.000 dólares. A partir de los 95.000 aparecen los efectos de habituación. Siempre teniendo en cuenta que estos valores varíanentre los países.

Los individuos de países más ricos necesitaban mayor número de ingresos para alcanzar mayores niveles de bienestar. La caída a partir de este punto es relacionada por los autores con la comparación social. Y es que caer en esta trampa es una de las maneras más fáciles de generar infelicidad.

Hay una relación casi directa entre el número de actividades agradables que realizamos y los niveles de bienestar

En la misma línea, otro estudio de la universidad de British Columbia en 2015 de la mano de Kushlev y colaboradores, con más de 12.000 personas, señala que el dinero no reporta niveles más altos de bienestar. Lo que sí que consigue es disminuir la emoción de tristeza.

Por lo que parece que los ingresos económicos, tienen la capacidad de ayudarnos a gestionar preocupaciones. Una vez que hemos conseguido pagar un crédito, acceder a una vivienda, sanidad, educación etc, pierden el poder de generar emociones agradables.

La mayor parte del bienestar que sienten las personas no depende directamente de las circunstancias. Es decir, tener una casa más grande, un coche más rápido o el último modelo de teléfono móvil, son estímulos que a corto plazo pueden suponer un incremento del placer, pero conforme va pasando el tiempo, nos habituamos a ellos y pierden esa capacidad.

La clave para ser feliz está en las actividades que hagamos durante nuestro día a día. Hay una relación casi directa entre el número de actividades agradables que realizamos y los niveles de bienestar. Por ello es de vital importancia que dediquemos tiempo diario a aquello que nos gusta.

El dinero por sí mismo, no da la felicidad, aunque, es cierto que ayuda a eliminar preocupaciones

A parte de este tipo de actividades, el ejercicio físico, ha demostrado ser eficaz a la hora de incrementar el estado de ánimo y reducir los niveles de ansiedad. Realizar actividad física tres o cuatro veces a la semana, nos ayuda a gestionar emociones de forma eficaz.

Además, el contacto social de calidad es una de las variables clave en los estudios que se han realizado con personas con niveles altos de felicidad. A su vez, se ha demostrado como un amortiguador del estrés y la ansiedad.

Como conclusión, resaltar, que el dinero por sí mismo, no da la felicidad, aunque, es cierto que ayuda a eliminar preocupaciones. La clave de la felicidad está en nuestro día a día. Por ello, si queremos ser más felices, deberemos cambiar el foco de nuestros esfuerzos.

Síguenos también en el Facebook de El HuffPost Blogs