Bulgaria era el único miembro de la UE que contaba con una exención para importaciones por vía marítima, el principal método de entrada de crudo en el país.
Se trata de un objetivo voluntario al que se comprometieron como respuesta a la invasión rusa de Ucrania y el reto de romper la dependencia de sus combustibles fósiles.
Ribera fijó en 2026 el objetivo de que estos proyectos "puedan arrancar con normalidad y puedan reducir de forma muy importante" la necesidad de importar combustible.
La previsión del FMI es que su PIB crezca un 2,6% en 2024 y un 1,1% en 2025 gracias al aumento del gasto militar y del consumo privado. Putin se vanagloria de tener el sistema que más crece en el continente, pero a largo plazo la perspectiva cambia.
Moscú corre el riesgo de perder miles de millones de rublos mientras los drones ucranianos apuntan a centros petroleros clave. La guerra por las infraestructuras estratégicas se ha dado la vuelta.
La empresa ucraniana de extracción de petróleo y gas Ukrnafta abrió un pozo en el este de Ucrania con un rendimiento inicial de petróleo de 51,4 toneladas por día.
Cerca de 200 países han acordado una hoja de ruta para dejar atrás los combustibles fósiles, culpables de buena parte de las emisiones y el desgaste del planeta. Una transición "equitativa y ordenada" con la vista en 2050.
El texto cerrado por los 200 países presentes en Dubái supone la primera mención directa a los principales responsables de la crisis climática: petróleo, carbón y gas.
La OIEA dice que una docena de países estarán equipados con energía nuclear en pocos años e incluye a nuestro vecino del sur, que podría contar con asistencia rusa.
La comunidad internacional señaló desde el primer momento a Rusia, pero el Kremlin siempre negó haber llevado a cabo esta acción. Medios de Alemania y EEUU afianzan esta línea de investigación.