Enrique Peña Nieto

No más aplausos. La primera señal

No más aplausos. La primera señal

Anhelo un país en el que se destierre la ovación hueca al político y el triunfalismo, en el que el premio sea la transformación de la sociedad, la reducción de la pobreza y de la corrupción, el progreso y buen funcionamiento de las instituciones, un país que no se sostenga con aplausos sino con el trabajo arduo de políticos desinteresados