fiesta

La fiesta más rara del mundo

La fiesta más rara del mundo

Aparentemente, la Romería de Santa Marta de Ribarteme, del 29 de julio, es una fiesta de lo más normal, muy parecida a las miles que se celebran en Galicia en estas fechas en honor a sus santos patrones. Hay misa mayor, procesión y banda municipal, hay pulpo, churrasco y rosquillas, y por la noche, una buena orquesta. Sin embargo, la Romería de Santa Marta es a mi modo de ver la fiesta más extraña del mundo: en esta aldea gallega los que han recibido una gracia de la patrona, casi siempre de salud, o los que esperan recibirla, acompañan la imagen de su santa en procesión metidos en un ataúd, a hombros de familiares y amigos.
Yo soy de 'Todos los santos'

Yo soy de 'Todos los santos'

Odio Halloween, no pertenezco a ningún grupo antiimperialista ni antiyanqui y no me acerco al chauvinismo. No odio las fiestas importadas por definición ni llamo paganos a quienes las disfrutan. La aceptaría gustosa si se sumara a nuestros festivos patrios en forma de días libres, pero me temo que no cuela.
España es

España es

España es ante todo colectivismo y fiesta. La mesa reservada en el chiringuito para 18 personas, sentarse en la piscina o en la playa durante seis horas sin abrir un libro, los chavales que juegan al fútbol, salen a la discoteca, se conectan a internet y se beben un calimocho juntos el mismo día.