A toda Roma le llega su Nerón
Incluso desde un punto de vista puramente capitalista, la imprevisibilidad de un ego como el del nuevo presidente hará que todo el sistema tiemble. Si algo no les gusta a los poderosos inversores, aquellos que se divierten jugando a la ruleta en Las Vegas e invirtiendo aquí y allá con su famoso "espíritu de riesgo" son, paradójicamente, las incertidumbres. Bastante tienen con sus propias borracheras.