Ibiza, ese pedrusco salido del mar

Ibiza, ese pedrusco salido del mar

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En contra de lo que la comunidad científica internacional llevaba décadas afirmando, estudios recientes de la Universidad de Massachusetts han confirmado que Ibiza no la inventó Loco Mía, si no que esta ya existía desde mucho tiempo antes.

Al parecer todo empezó hace 60 millones de años, cuando la placa tectónica africana colisionó con la euroasiática. Como consecuencia del tremendo pepinazo se produjeron enormes plegamientos de tierra, los cuales formaron las principales cordilleras del norte de África y el sur de Europa (Apeninos, Pirineos, Atlas, Alpes...). Del mismo modo y al mismo tiempo nacieron las Baleares, que aunque a ti te parezcan algo excepcional, superchachi y megaguay, en términos geológicos no son más que una simple continuación de la Cordillera Bética.

Mallorca llegó a estar unida por tierra con Menorca y Formentera con Ibiza

Por aquel entonces los mares y océanos del mundo estaban muy creciditos, tanto que el nivel del Mediterráneo estaba cientos de metros más arriba de lo que está hoy y por lo tanto la mayor parte de nuestras islas estaban sumergidas bajo las aguas.

Pero quiso Dios (o el Niño Jesús, dependiendo de las fuentes consultadas) que con la llegada del período Cuaternario empezara a refrescar de lo lindo y así como que no quiere la cosa el planeta se vio inmerso en una tremenda glaciación. Para los que os pasasteis las clases de geología fumando cigars en la parte de atrás del instituto, os diré que una de las consecuencias de una glaciación es un tremendo descenso del nivel de los mares. Esto es debido a que las bajas temperaturas globales hacen que una gran parte del agua de la tierra se acumule en los polos en forma de hielo.

El proceso de deshielo de los polos no ha terminado aún y de ahí que año tras año veamos como el nivel del mar va creciendo lenta pero inexorablemente

Este fenómeno hizo que las Baleares fueran poco a poco saliendo del fondo del mar, hasta tal punto que Mallorca llegó a estar unida por tierra con Menorca y Formentera con Ibiza. Vamos que unas veces por mucho y otras por poco, por aquí no había quien pudiera poner un beach club en condiciones.

Pero el buen tiempo, al igual que las hombreras, siempre vuelve y poco a poco el frio fue paulatinamente dando paso al calorcito rico. Los glaciares comenzaron a derretirse y el Mediterráneo se volvió a llenar de agua hasta alcanzar el aspecto que tiene en la actualidad.

Pero cuidadín amigas, no cantemos victoria todavía porque la diversión no ha hecho más que empezar... Pese a haber comenzado hace nosecuantos millones de años, el proceso de deshielo de los polos no ha terminado aún y de ahí que año tras año veamos como el nivel del mar va creciendo lenta pero inexorablemente. Esto es una noticia bien chunga para poblaciones costeras como Sant Antoni, Santa Eulalia o Portinax, sin embargo es un notición para lugares del interior como Sant Mateo, Santa Gertrudis o Sant Joan, que en unos miles de años de nada podrán presumir de tener sus casas, hoteles y restaurantes en primerita línea de playa oiga.

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———— Esta historia se publicó originalmente en mi blog Typic d'aquí