El juez Carretero se defiende de las críticas por su declaración a Elisa Mouliaá: “Hice mi trabajo"
El magistrado se defiende de las críticas y anuncia que pedirá una investigación por la filtración de las declaraciones.

"Defenderé las diligencias informativas que ha abierto el Consejo General del Poder Judicial cuando toque y pediré amparo al órgano de los jueces", así de tajante se muestra el juez Adolfo Carretero, encargado de la instrucción de la denuncia de Elisa Mouliaá contra Iñigo Errejón por un presunto abuso sexual cuando es preguntado sobre la investigación que ha abierto el CGPJ al magistrado tras haber recibido 900 quejas ciudadanas por la forma de preguntar a denunciante y acusado.
"Pediré una investigación por la revelación del vídeo. Yo me limité a preguntar por la única que tengo de la presunta agresión sexual, que es la denuncia. Hice mi trabajo porque esa prueba ha de ser consistente. Por eso algunas preguntas podrían ser incómodas. Lo que se ha visto en medios está sesgado porque la declaración duró una hora y media si se desvelaran las declaraciones de presuntas agresiones sexuales nos sorprenderíamos todos", explica el magistrado a Artículo 14.
Tras filtrarse la declaración de Mouliaá, fueron muchas las críticas haciendo referencia a la forma de preguntar y la insistencia. "Es que no entiendo por qué se sintió violentada”, le llegó a decir a Elisa Mouliaá el juez Adolfo Carretero durante la declaración el pasado jueves.
Unas polémicas preguntas que, incluso pese a la poca calidad de la cámara que graba las declaraciones, mostraron a denunciante visiblemente incómoda. "Alguna preguntas pueden ser inconvenientes, pueden ser molestas, pero no tiene más remedio que contestar", le advertía al respecto Carretero. Por cierto, a lo largo de la hora y veinte que duró su declaración, Mouliaá estuvo de pie a pesar de que es habitual que en este tipo de casos se facilite la comodidad de la supuesta víctima dejándose que se sienten en una mesa. Una decisión del juez que en sala suele ser habitual y que en esta ocasión no ha sido una excepción.
En el momento de iniciar a relatar los hechos y contar que estuvieron tomando una cerveza y acudieron a la fiesta en la que comenzaron los hechos denunciados. Sin embargo, antes de empezar a explicar los hechos, el juez paraba la declaración: "Usted se sintió violentada pero es una persona que está acostumbrada a tratar con el público, ¿no? Es actriz, ¿no es capaz de decir estas actitudes no son aceptables? No lo entiendo", explicaba al respecto el magistrado con algún resoplido mientras la actriz respondía.
"Se apartó, ¿pero le dijo usted algo?", insistía el juez sin dejar de preguntar y hablar hasta el punto de hacer explicar a la actriz si en el momento en el que bailaba con un amigo bailaba "algo lento o algo movido" e incluso pidiéndole identificar la canción de Los Secretos que quería bailar su amigo Fernando. "¿Usted dijo algo para que ellos lo pensasen?", seguía interrogando Carretero a Mouliaá cuando explicaba el momento en el que Errejón llevó a la actriz a una habitación "de forma violenta".
El juez, que no deja de mantener un tono crítico a lo largo de la declaración e incluso cuestiona el relato de Mouliaá con constantes interrupciones. "¿Pero usted le dijo algo? ¿Se apartó? ¿Le pidió que parara?", insistía constantemente el magistrado, quien mostró incredulidad ante sus respuestas. “Es raro que usted no diga nada”, añadía el juez cuando la actriz explicaba que se quedó "paralizada" ante lo que había hecho Errejón.
Uno de los momentos del interrogatorio en el que se ve que Elisa Mouliaá se muestra incómoda es el momento en el que relata ese supuesto incidente en una habitación donde Errejón la empuja sobre una cama y se saca el miembro viril sin consentimiento. "¿Para qué cree usted que hizo eso? ¿Le intentó bajar las bragas? ¿Cuánto tiempo estuvo tocándole el cuerpo?", pregunta insistentemente sin dejar casi contestar y cuasi tratando de justificar que el echo de llevar ropa interior exime el hecho de sacar el miembro viril sin consentimiento al no haber riesgo de penetración.
¿Quién es Carretero?
La carrera de Adolfo Carretero ha estado también marcada por la actuación contra el cómico Dani Mateo por un delito de ultraje a la bandera, tras un gag en el que se sonó la nariz con la enseña nacional. Asimismo, investigó a la monja sor María Gómez en relación con un caso de bebés robados y dictó una innovadora orden de alejamiento del Metro en el contexto del clan de las “bosnias” para prevenir hurtos, aunque siguieron reincidiendo. También mantuvo imputada un año a la periodista Pilar Velasco, que había publicado una noticia sobre la presunta corrupción del entonces vicepresidente madrileño, Ignacio González. En este caso, Carretero llegó a cuestionar el derecho al secreto profesional de las fuentes, lo que llevó a un magistrado de la Audiencia de Madrid a acusarlo de poner en riesgo la libertad de prensa.
Conocido en los juzgados de Plaza de Castilla como "el del 47”, ha generado críticas en varias ocasiones como el caso de un colega de su asociación judicial, Francisco de Vitoria, que explicó que durante un congreso lo criticó con "mala educación, de forma hiriente y aberrante" y no son muchos los que señalan que en varias ocasiones ha evocado la figura de su padre para reforzar sus argumentos en debates.