Muerte de un hincha

Muerte de un hincha

La muerte de James Nolan ha sido muy sentida en Polonia. Los hinchas irlandeses que estos días han visitado el país han dejado una profunda admiración entre los polacos.

James Nolan era un irlandés de 21 años. Vivía en Wicklow, donde estudiaba ingeniería medioambiental. Él, como otros cerca de 50.000 compatriotas, estaba de viaje por Polonia, siguiendo a la selección irlandesa. Había organizado con sus amigos una ruta que le llevaría de Gdansk a Poznan, ciudades donde se han disputado los encuentros del Grupo C de la Eurocopa 2012. Tenían pensado pasar la noche del fin de semana entre el 16 y el 17 de junio en Bydgoszcz. James y sus amigos estuvieron bebiendo cerveza en la Zona de Aficionados hasta la una de la noche. A esa hora James se separó del grupo para pasear solo y posiblemente despejarse. Los amigos siguieron su propio camino.

Al día siguiente comprobaron que James no había vuelto al hotel. Fueron a un punto de información turística para informar de la desaparición y allí les pusieron en contacto con la policía y la Embajada de Irlanda. Ese mismo día imprimieron 500 carteles con el rostro de James y los repartieron por la ciudad. Se inició la búsqueda por parte de la policía y se dio la voz de su desaparición en todos los medios de comunicación polacos posibles.

 

Desgraciadamente, el cuerpo de James Nolan fue hallado por los buzos de la policía el miércoles por la mañana en el río Brda, el cual atraviesa Bydgoszcz, a 150 kilómetros de Poznan. Al día siguiente tres familiares se personaron para reconocer el cadáver. El jueves se realizó la autopsia que confirmó que había muerto ahogado en las aguas del Brda. Tenía todas sus pertenencias: dinero, tarjetas y móvil, y no presentaba señales de violencia. La policía ha llegado a la evidente conclusión de que la causa de la muerte ha sido un desgraciado accidente.

"Queríamos ver tantas cosas en Polonia. En Gdansk pasamos la noche en un camping donde nos persiguió un jabalí. Camino de Gdansk nos alojamos en un bello camping de Torun. Queríamos detenernos en Bydgoszcz para ver mientras más cosas mejor. Siempre tendremos en nuestros corazones los recuerdos de este viaje", ha logrado decir un emocionado Aaron Eustace, compañero de viaje de James Nolan.

La muerte de James Nolan ha sido muy sentida en Polonia. Los hinchas irlandeses que estos días han visitado el país han dejado una profunda admiración entre los polacos. Los seguidores irlandeses son considerados como ejemplo para cualquier afición del mundo por su espíritu incansable, en la victoria y en la derrota, y sin recurrir nunca a la violencia. Por su parte, los hinchas irlandeses también han descubierto un país donde han sido muy bien acogidos y la gente les aprecia. En el foro oficial de los hinchas de la selección irlandesa los agradecimientos a Polonia son constantes. Incluso el padre de James Nolan ha dado las gracias en una rueda de prensa a las autoridades polacas por el trato dado a su familia. Ante el infortunio no se puede hacer nada.

El primer día de verano en los Ayuntamientos de Bydgoszcz y Poznan la bandera de Irlanda ondeó a media asta.

Un día después de conocerse la muerte del joven jugador Miki Roqué, James Nolan era enterrado en su ciudad natal sin que casi ningún medio de comunicación español le haya dedicado ni un segundo.