Los dueños de un mítico restaurante de San Francisco se hartan y echan el cierre: "Nos vamos a España"
Fue nombrada en 2023 como una de las 50 mejores pizzerías de Estados Unidos.
El restaurante Yellow Moto de San Francisco fue nombrado en el año 2023 como una de las 50 mejores pizzerías de Estados Unidos. Sin embargo, ese galardón no ha evitado que los dueños hayan tenido que tomar la decisión más dura: echar el cierre.
Tal y como recoge Mission Local, medio de comunicación local de San Francisco, los propietarios del establecimiento han decidido mudarse a España, concretamente a Valencia. “Lo hemos hecho por nuestros hijos. Tenemos tres hijos de 8, 11 y 12 años”, ha justificado Allison White, la esposa del propietario de Yellow Moto, David White.
En cuanto al cierre de la pizzería, la mujer ha lamentado que “siempre lo sentí como una extensión de mi hogar, y va a ser duro decir adiós”. Sin embargo, la realidad es que la clientela de Yellow Moto se había reducido considerablemente durante los últimos tiempos, haciendo inviable la continuidad del negocio.
La pizzería echó a andar en el número 702 de (curiosamente) Valencia Street en el año 2019 bajo el nombre Flour + Water Pizzería. Sin embargo, a mediados de 2022, el establecimiento fue rebautizado como Yellow Moto.
Allison White ha reconocido que “hemos visto un cambio significativo en los últimos años”. No obstante, la mujer sí que ha destacado que “ese sentido de comunidad (...) no ha desaparecido. Simplemente hay menos volumen de gente en este barrio por alguna razón. Mientras que siento que otros barrios no tienen ese problema”.
White ha explicado que han intentado ser creativos para salvar la pizzería, cambiando tanto los horarios como el personal. Pero las cuentas no salían, no había suficientes clientes para poder equilibrar el creciente coste de los productos manteniendo precios razonables.
Después de anunciar su cierre, este pasado fin de semana Yellow Moto se ha llenado de californianos que querían despedirse de la mítica pizzería. Sin embargo, esa afluencia de público ya ha llegado demasiado tarde para poder salvar el restaurante.