Por favor, habilita JavaScript para ver los comentarios de Disqus.
El Gobierno emite un comunicado de urgencia para evitar navegar entre el Golfo de Cádiz y el Estrecho

El Gobierno emite un comunicado de urgencia para evitar navegar entre el Golfo de Cádiz y el Estrecho

Las interacciones de las orcas con embarcaciones de recreo se redujeron el verano pasado hasta un 40% tras la adopción de varias medidas.

Mapa de las zonas con mayor riesgo de interacciones con las orcas en la costa entre Cádiz y Tarifa.Delegación Gobierno de Andalucía

Si este verano piensas cruzar el Estrecho en velero, mejor piénsatelo dos veces. El Gobierno ha lanzado una advertencia clara: las orcas han vuelto, y con ellas los riesgos de sufrir encuentros inesperados en alta mar. La recomendación es tajante: evitar la zona comprendida entre el Golfo de Cádiz y el Estrecho de Gibraltar, y si no hay más remedio, bordear la costa por rutas seguras.

Según informa Europa Sur, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha puesto en marcha una campaña de concienciación que se mantendrá activa durante todo el verano, con mensajes en redes sociales, páginas oficiales y distribución de mapas en Capitanías Marítimas. Todo para prevenir nuevos incidentes en una franja del Atlántico especialmente conflictiva en los meses de mayo a agosto, cuando aumenta la presencia de estos cetáceos.

El último susto lo dio el Aspra, un velero italiano que quedó a la deriva tras ser golpeado durante más de media hora por un grupo de orcas cerca de Tarifa. No es un caso aislado. En los últimos años, numerosos navegantes han alertado de interacciones similares, la mayoría de ellas centradas en el timón. Las autoridades insisten en que estos encuentros pueden poner en riesgo tanto a la tripulación como a los propios animales, por lo que instan a seguir las recomendaciones al pie de la letra.

Qué hacer si te topas con una orca

Lo primero: no frenes. Esa es la consigna del Ministerio de Transportes si una orca aparece en tu ruta. En caso de interacción, hay que mantener el rumbo hacia aguas menos profundas, lo más cerca posible de la costa. Nada de acercarse a las bandas del barco ni asomarse: los golpes pueden ser bruscos y provocar caídas al mar.

El protocolo es claro. Está prohibido usar cualquier tipo de método disuasorio que pueda alterar el comportamiento de los animales. Si la situación lo permite, se pueden tomar fotos del encuentro —siempre sin comprometer la seguridad— y enviarlas por correo a orcas@sasemar.es para ayudar en la identificación de ejemplares. Y ante cualquier incidente, contacto inmediato con el centro de Salvamento Marítimo más cercano a través del canal 16 del VHF.

Las recomendaciones han sido elaboradas por una comisión de seguimiento conjunta entre la Dirección General de la Marina Mercante y la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación. Además, cuentan con el aval de un taller internacional sobre orcas celebrado en Madrid con expertos de España, Portugal y Marruecos.

¿Funcionan las medidas del Gobierno? Parece que sí

Los datos apuntan a que sí. Las interacciones entre embarcaciones y orcas se redujeron un 40% durante el verano de 2024 en comparación con el año anterior, según los reportes recogidos por Salvamento Marítimo. Un descenso significativo en una de las zonas más transitadas del Atlántico, donde hasta hace poco era habitual encontrar veleros con daños en el timón, alertas por radio y maniobras de evasión de última hora.

Este cambio no ha sido casual. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), junto al Ministerio de Transportes, diseñó el año pasado una batería de recomendaciones específicas, destinadas tanto a profesionales como a navegantes de recreo. Entre ellas: evitar la zona marcada en los mapas oficiales, mantener el rumbo sin detener la embarcación en caso de interacción, y comunicar cualquier avistamiento a través del canal 16 del VHF. El mensaje caló. La mayoría de incidentes registrados en 2024 fueron menos graves y con menor duración.

La comisión de seguimiento, compuesta por responsables de la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación (MITECO) y de la Dirección General de la Marina Mercante, concentra sus esfuerzos precisamente en el corredor marítimo entre el Golfo de Cádiz y el Estrecho de Gibraltar. Allí se ha reforzado la difusión de protocolos, la coordinación con Capitanías y Salvamento Marítimo, y la vigilancia del comportamiento de los cetáceos.

El Gobierno insiste: las recomendaciones siguen vigentes todo el año, pero es entre mayo y agosto cuando más atención hay que prestar. La probabilidad de encontrar orcas en esta zona es alta, y la mejor manera de evitar problemas es conocer el protocolo y respetar las pautas. También se insiste en no recurrir a maniobras bruscas ni a medidas disuasorias ilegales, como ruidos o dispositivos físicos que puedan alterar a los animales.

Por eso, la campaña no se queda en redes sociales. Se han distribuido carteles, mapas y folletos informativos en clubes náuticos, escuelas de vela y marinas deportivas. Y los datos, por ahora, acompañan: menos incidentes, menos daños y más conciencia en el sector náutico.