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Ni por estética ni por capricho: la razón por la que los radiadores se colocan debajo de las ventanas en hogares españoles

Ni por estética ni por capricho: la razón por la que los radiadores se colocan debajo de las ventanas en hogares españoles

La barrera de calor que crean aíslan del frío.

Una mujer ajustando la temperatura en un radiador de calefacción.Getty Images

En la mayoría de los hogares españoles, los radiadores se colocan estratégicamente bajo las ventanas, una decisión que no responde al azar, sino a criterios de eficiencia energética y confort térmico. Según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la calefacción representa el 63% del consumo energético del hogar, superando ampliamente el gasto conjunto en electrodomésticos, agua caliente, cocina e iluminación. Por ello, la ubicación correcta de los radiadores es crucial para reducir este consumo.

La Asociación de Fabricantes de Generadores y Emisores de Calor por Agua Caliente (FEGECA) ha destacado que situar los radiadores debajo de las ventanas permite un ahorro energético de hasta un 5%. Además, esta disposición favorece una mejor distribución del calor y compensa el "efecto de pared fría" que producen las ventanas, logrando una temperatura más uniforme en la estancia.

Este enfoque se basa en el principio de la corriente convectiva, un fenómeno natural en el que el aire caliente asciende y el frío desciende. Al colocar el radiador bajo la ventana, el aire frío que entra por ella se calienta rápidamente, evitando la formación de corrientes incómodas y consiguiendo un equilibrio térmico más eficiente.

Para maximizar el rendimiento de los radiadores ubicados bajo las ventanas, los expertos aconsejan no cubrirlos con muebles o cortinas pesadas que bloqueen la circulación del aire. Además, instar a mejorar el aislamiento térmico de las ventanas es clave para evitar pérdidas de calor y reducir la entrada de aire frío.

En caso de no ser posible situar los radiadores en esta ubicación por cuestiones de espacio o diseño, los especialistas recomiendan instalarlos lo más cerca posible de la ventana, asegurando así un rendimiento óptimo del sistema y manteniendo el confort térmico en el hogar.

Este enfoque, basado en principios físicos y energéticos, refuerza la importancia de pequeñas decisiones que, además de mejorar la calidad de vida, contribuyen a un uso más sostenible de los recursos en los hogares.