Piden pulsar la tecla 'cancelar' en todos los cajeros nada más retirar el efectivo: "Esquivas una estafa innecesaria"
Una sencilla acción que todos hacemos puede ayudar a los delincuentes a robarnos todo nuestro dinero.

Las tarjetas de crédito o los pagos a través de teléfonos inteligente, están ganando terreno a una gran velocidad, especialmente desde la panademia del COVID-19, cuando los expertos recomendaban pagar de esta forma para evitar el contacto.
Sin embargo, aunque su uso diario ha disminuido, el efectivo continúa siendo el método de pago más extendido en España, según el último informe publicado por el Banco de España en noviembre de 2024.
"El efectivo es el medio de pago más utilizado en comercios físicos para el 59% de la población, seguido por la tarjeta (30%, frente al 32% en 2023) y por los dispositivos móviles, que son el medio de pago principal para el 11% de los consumidores, frente al 8% en 2023", desarrolla el documento.
"En los pagos entre particulares, el efectivo también es el medio de pago más habitual para el 63% de la población, seguido del Bizum (33%)", añade. Una situación en la que no se esperan grandes cambios a corto plazo.
Aquellas personas que deciden seguir pagando en efectivo suelen recurrir a los cajeros automáticos para retirar el dinero, una operación que puede parecer sencilla y simple, pero que entraña una seria amenaza al solicitar e imprimir el recibo de la operación.
Cuidado con la información confidencial
El recibo impreso contiene información confidencial, como el saldo de la cuenta o detalles de los números de cuenta y tarjeta, datos que pueden ser utilizados por delincuentes para llevar a cabo fraudes o robos. Estos recibos, muchas veces desechados de forma apresurada, pueden ser recogidos por estafadores, quienes los usan para acceder a cuentas bancarias y realizar transacciones fraudulentas.
Por ello, los expertos recomiendan no imprimir el recibo del cajero automático. Una vez realizada la operación deseada, aconsejan pulsar la tecla de 'cancelar' cuando aparece la opción de imprimir el recibo para finalizar el proceso y consultar el movimiento por otra vía con el fin de evitar una estafa innecesaria.
La tecnología ha facilitado el acceso a la información financiera de forma rápida y segura. Actualmente, la mayoría de las entidades bancarias ofrecen aplicaciones móviles que permiten a los usuarios consultar su saldo y realizar seguimientos de sus movimientos sin la necesidad de imprimir un recibo.
En caso de necesitar este recibo en físico, es imprescindible guardarlo en un lugar seguro y destruirlo correctamente cuando ya no sea necesario, cortándolo en trozos pequeños para que la información contenida sea ilegible.