Sandalio, Firmo y Burgundófora: este es el pueblo con los nombres más raros de España
Aunque pueden parecer propios de una novela antigua, son los nombres de los vecinos de este pequeño poblado.
El pequeño municipio de Huerta del Rey, situado en Burgos, cuenta con apenas 880 habitantes, según el Instituto Nacional de Estadística, y un récord Guiness que le cataloga como el pueblo con el mayor número de habitantes con nombres raros.
El origen de esta tradición se remonta al siglo XX, concretamente a 1930, momento en el cual en la localidad solo existían cuatro apellidos, lo que generaba grandes inconvenientes para poder localizar a todos los habitantes, ya que muchos además de compartir el mismo nombre tenían el apellido igual.
Debido a esta situación, los ciudadanos de este pequeño lugar decidieron buscar una solución inédita: buscar nombres poco comunes para así poder distinguirse fácilmente. De este modo, el secretario del Ayuntamiento del pueblo decidió cambiar la tradición y seguir con el santoral romano y los vecinos comenzaron a ser bautizados con nombres de beatos, santos y mártires de la Iglesia Católica.
Aunque la tradición se ha ido perdiendo con el paso de los años, en el año 2008 los vecinos organizaron un encuentro en el que reunieron a cientos de personas con nombres únicos como Sandalio, Licerio, Landelino, Wilfredo, Firmo o Filadelfo. Además, en el mes de julio parte de sus ciudadanos llegaron incluso a rodar un cortometraje de la marca de bebidas Aquarius en el que explicaban esta situación excepcional.
