España apuesta por los aviones propulsados con el elemento desechado de la cocina
A la vanguardia de la sostenibilidad.

¿Sabías que España está a la vanguardia de una acción sostenible que se presume clave en materia de transporte nacional e internacional? Se trata de las distintas iniciativas por las que aviones de aerolíneas de renombre están probando un combustible sostenible. Elaborado, por ejemplo, a partir de aceite de cocina usado.
Se trata de proyectos en los que está involucrados energéticas como Repsol o Cepsa (Moeve), que ya venían produciendo este tipo de combustible pero de forma más reducida. Así lo recogió en su día el diario 20 Minutos.
Repsol puso en marcha una planta en Cartagena completamente dedicada a la producción de combustibles renovables a escala industrial, con una capacidad para fabricar 250.000 toneladas anuales de combustibles renovables, a partir de residuos, como el aceite de cocina usado, que se pueden utilizar en aviones, barcos, autobuses, camiones o coches.
Repsol ya cuenta con más de 360 estaciones de servicio que ofrecen combustible 100% renovable. A finales de año prevé alcanzar los 600 puntos y ya ha anunciado que acelerará en este despliegue y tendrá la mayor red de este tipo de estaciones de Europa, con 1.500 en 2025.
¿Cuáles son las cifras que se manejan?
Asimismo, junto con alianzas para el suministro de combustibles renovables con compañías líderes en el sector del transporte pesado por carretera, del transporte de pasajeros en España, navieras o aéreas, el grupo aspira al despliegue de estos combustibles renovables en 600 de sus estaciones de servicio a finales de este año y en 1.900 en 2027.
Además, a esta nueva planta de Cartagena, cuya producción de combustibles renovables representa un 5% de su producción total de diésel o un 17% de su producción de queroseno, sumará en 2025 una segunda en Puertollano, con una inversión de 120 millones de euros y que producirá 240.000 toneladas de combustibles renovables. Igualmente, prevé replicar este modelo en un tercer centro industrial en España antes del año 2030.