Una cita con Pedro Sánchez

Una cita con Pedro Sánchez

YOLANDA DOMÍNGUEZ

El nuevo presidente del gobierno, apodado ya como "Mister Handsome" o el "fotogénico economista" por los diarios internacionales, no nos la da con queso con su 1,90 cm de estatura y su look de Ken recién salido de la caja. Huele a limpio, brilla y sonríe, pero nosotras ya llevamos muchos pretendientes a la espalda y sabemos perfectamente que las apariencias engañan: nuestras más de 500 horas de experiencia en el manejo de Meetic y Tinder, más de 3.400 perfiles vistos y 3 citas fallidas en First Dates nos avalan. 5 minutos y 5 preguntas es todo lo que necesitamos para saber si Sánchez Pérez-Castejón encaja en el perfil de presidente que buscamos y cumple con los requisitos mínimos para que le consideremos "apto". ¿Dará la talla el señor Sánchez en este fugaz encuentro?

Cuántas veces hemos comentado entre mujeres lo útil que sería llevar a la primera cita un cuestionario escrito con unas preguntitas que nos sirvan para separar la paja del grano. Cuánto tiempo nos ahorraría. De cuántos príncipes-sapo nos libraría. ¡No esperemos más! Hagamos la prueba hoy mismo con este flamante presidente. "Hola Pedro, ¿qué tal? mira te paso aquí una encuesta que no te llevará más de unos minutos contestar. Cuando acabes pones tus datos de contacto que yo espero con mi vermut en la barra del bar".

Señor Sánchez, ¿es usted feminista?

Esta pregunta es crucial. Hay que estar atentas por si le tiembla un ojo, se lo piensa mucho o tarda en contestar. Si titubea es que no sabe lo que significa y si contesta "sí" es sólo para llevarnos al huerto. Descalificado. Cero. Si sonríe tranquilo y responde un contundente "por supuesto" podemos respirar. Estamos en 2018, un presidente al que le cueste admitir en público que es feminista debe volver a meterse en el DeLorean y regresar a su cueva en el pasado imperfecto.

Señor Sánchez, ¿contará con mujeres en su equipo de gobierno?

Y no nos referimos a photocalls con la palabra "NOSOTRAS" a modo de mosaico bizantino. Tampoco nos sirve el lacito morado del día después ni a un líder que nos quite el micrófono y nos diga lo que tenemos que hacer. La pregunta se refiere a si su equipo va a ser paritario, si se van a respetar las cuotas, si va a contar con la voz y la opinión de las mujeres a la hora de ocupar los cargos y tomar las decisiones. Aunque ya haya comunicado que en su gobierno las mujeres serán la mitad esperamos que no sólo se ocupen de las áreas de igualdad. Queremos economistas, científicas, deportistas y juezas a la cabeza. Mire que ahora en un pis pas nos organizamos bajo un hashtag y le dejamos vacío el chiringuito @NoSinMujeresEnElHemiciclo

Señor Sánchez, ¿va a considerar de una vez la violencia de género un problema de estado?

Sea valiente, mójese. En una escala del 1 al 10 ¿cómo de grave le parece que asesinar, violar y maltratar a la mitad de la población sea considerado algo normal? Porque todos esos actos cotidianos de terrorismo van a ser ahora su responsabilidad. Se cargarán a su cuenta. Le pasarán factura. Ya puede llenar de pos-it la Moncloa, cambiarse la alianza de dedo o lo que sea para no olvidarlo: la vida de muchas mujeres y de muchos menores está en sus manos. De usted depende evitar más abusos y muertes transformando la educación, la cultura, la economía y las leyes.

Señor Sánchez, ¿combatirá el comercio con el cuerpo de las mujeres apoyando su libertad real?

No habrá igualdad mientras no haya libertad, y la libertad no se consigue mirando a otro lado mientras se comercia con las personas. No hablamos de la prestación de un servicio en horario laboral sino del abuso físico y moral de las mujeres, de solidaridad con las que están en situaciones más desfavorecidas. Hablamos de un problema colectivo, no de individualidad. En nuestro país la prostitución es alegal y el alquiler úteros se está convirtiendo en un must have de celebrities y millonarios. Nos preocupan los derechos reales de las personas, no el postureo de Instagram.

Señor Sánchez, ¿va a trabajar para conseguir la igualdad de salarios entre hombres y mujeres?

El anterior pretendiente ¡digo presidente! se saltó esta pregunta alegando que esta cuestión no era competencia del gobierno y usted le ha echado del trono, precisamente por incompetente. Señor Sánchez, dejémonos de preliminares y vayamos al grano: Míster Rajoy dejó el listón muy bajo en materia de igualdad. Superarlo es bastante fácil porque hay ganas y hay necesidad. Pero déjeme decirle que estas princesas votantes ya no visten de rosa, no aguardan sentadas ni creen en los cuentos de hadas. De usted esperamos mucho más, hemos besado ya demasiados sapos y no nos vamos a conformar.