Códigos QR: el futuro de los pagos en bares y restaurantes
La implantación de esta tecnología tiene una alta probabilidad de integración en la sociedad.
El 74% de los pagos se realizan con tarjeta de crédito o débito. Este dato deja claro que una gran parte de los compradores prefieren utilizar medios digitales en lugar de pagar en metálico.
Dentro de ese grupo significativo, podemos distinguir a los que buscan la comodidad por encima de todo. Son los usuarios que utilizan el sistema contactless.
Esta forma de pago lleva muchos años implantada en nuestro país, pero nos demuestra que queremos reducir al máximo la fricción en el momento del pago.
Por eso, surgen nuevas maneras de hacer intercambios económicos entre particulares y con las empresas a las que contratamos servicios o productos.
Una muestra de esto es la integración de las tarjetas en el móvil o lo populares que se están volviendo los pagos con QR.
Sin ir más lejos, según el estudio Mobile & Conectividad inteligente de IAB Spain, el 82,2% de los encuestados conoce y utiliza los códigos QR en distintos contextos. Por contra, sólo el 2% no sabe qué son.
Estos datos demuestran la gran acogida de los pagos digitales y los códigos QR. Además, indican que la implantación de esta tecnología tiene una alta probabilidad de integración en la sociedad.
En Glop tienen claro que esta forma de pago tiene futuro, ya que sus usuarios están apostando por esta tecnología. El motivo es la facilidad de uso y la familiaridad de los consumidores con el código QR al estar habituados a su uso en establecimientos como bares y restaurantes.
Según Glop, los hosteleros transmiten confianza en este método de pago, ya que mejora la satisfacción de sus clientes y permite ahorrar costes en personal así como optimizar procesos en la gestión de sus negocios con su TPV hostelería.
La digitalización ha revolucionado la forma en que hacemos muchas cosas en nuestra vida cotidiana, y los pagos no son una excepción.
El escaneo de tickets y el pago con tecnología móvil permiten agilizar muchos procesos que suponen un cuello de botella para los empleados de los negocios de hostelería, como la gestión y cobro de las cuentas en las mesas.
Por otra parte, los hosteleros perciben que el uso de este sistema aumenta la satisfacción de los clientes. Esto les permite fidelizar y atraer a nuevos consumidores gracias a las recomendaciones de quienes ya les conocen.
Las dificultades en el momento del pago en el sector de la hostelería
Muchos consumidores encuentran un momento de fricción importante en el momento del pago. De hecho, según una encuesta de YouGov, el 34% de las personas que viven en España considera que el peor momento de una velada en un bar o restaurante es el del pago.
El motivo principal es el tiempo de espera desde que consiguen pedir la cuenta hasta que los camareros se acercan con ella y pueden realizar el pago.
Estos tiempos se reducen en gran medida en los establecimientos que disponen de la opción de pago desde la mesa. Es un método que no solo mejora su percepción de la experiencia de ocio, sino que también ayuda al empresario a gestionar de manera más eficaz el trabajo de su personal de sala o terraza.
Pagar con QR en los bares y restaurantes
España es un país con un sector hostelero fuerte. Sin ir más lejos, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan que antes de la pandemia esta actividad económica suponía el 6,4% del PIB.
Asimismo, según los datos recogidos en abril de 2022, se produjo un incremento de las ventas en este sector correspondiente al 105,2% respecto al mismo mes del año anterior.
Esto denota el buen ritmo de crecimiento de estos negocios que tienen un peso fundamental en la economía de nuestro país.
Su capacidad de adaptación a las dificultades ha demostrado que los bares y restaurantes están dispuestos a seguir innovando en sus servicios. Un ejemplo de esto es la buena acogida de los sistemas de pago con código QR por parte de los empresarios y de su clientela.
Esta forma de realizar las transacciones económicas otorga una mayor libertad al usuario, permitiéndole tomar la iniciativa y realizar los pagos sin necesidad de esperar a que algún empleado acuda para atenderle. Se estima que el tiempo medio que puede ahorrar un cliente al realizar los pagos con QR es de unos 15 minutos.
De esta manera, al procesar los pagos en unos 30 segundos, se reduce el tiempo de permanencia en la mesa y esto favorece la rotación, lo que aumenta la rentabilidad del negocio.
El funcionamiento es muy sencillo: el cliente escanea un código QR con su teléfono móvil que le lleva a una página web o a una aplicación. Desde ahí, puede abonar el importe total o parcial de la cuenta. De esa forma, también se facilita el pago individual cuando los clientes acuden a comer con familiares o amigos.
También hay que destacar una ventaja importante para el negocio: la autonomía de los consumidores provoca una bajada en la intensidad del ritmo de trabajo de los camareros, aportando una evidente disminución del estrés. Esto posibilita mejorar su estado de ánimo, atender a más clientes y aumentar la rentabilidad para los empresarios.