Detenida en España la primera persona del mundo como presunto autor de un delito en el metaverso
La Policía Nacional de Aragón ha informado de su detención y la forma en la que trabajaba.
Nuevos tiempos conllevan nuevos delitos. Este sábado, la Policía Nacional ha informado de la primera detención por delitos en el metaverso. El sospechoso es un joven de 18 años con domicilio en la Comunidad de Madrid. Se le acusa de un delito de corrupción de menores, tenencia y distribución de pornografía infantil y explotación sexual de menores mediante Internet.
Según ha informado la Dirección General de la Policía, la detención del joven, que tenía 17 años cuando cometió los delitos, ha tenido lugar tras una investigación llevada a cabo por agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de Zaragoza.
Los cuerpos policiales activaron al alerta tras una denuncia de los padres de una niña de 11 años en mayo de 2022, en la que aseguraron que su hija había sido engañada 'online', con el fin de remitir fotografías y vídeos de carácter sexual a otro usuario.
Los investigadores analizaron el entorno donde se llevaron a cabo los hechos denunciados, una aplicación disponible para los sistemas operativos Android e iOS de reciente aparición en el mercado que está centrada en la creación de comunidades de usuarios interesados en el metaverso y que se ha popularizado rápidamente entre menores a través de plataformas como TikTok o YouTube.
El presunto delincuente se habría creado un perfil falso en el que se habría hecho pasar por una chica de 19 años con intereses bisexuales. Al buscar chicas, "se ganaba su confianza y lograba que le remitiesen fotografías y vídeos de carácter sexual", llevando a cabo intercambios de material de "otras víctimas", según Rubén Nido, portavoz de la Policía Nacional en Aragón.
'Modus operandi' típico de un pedófilo
Las primeras gestiones ubicaron al autor en España, tras comprobar su actividad en el chat, donde mantenía muchas conversaciones con menores. Según afirmó la Policía, el 'modus operandi' era "el típico" utilizado por pedófilos: una vez se ganan la confianza de las niñas, conseguía que estas le enviaran fotografías y vídeos sexuales.
Una vez se realizó la investigación técnica se consiguió identificar plenamente al investigado, siendo este un joven con residencia en la Comunidad de Madrid y sin antecedentes penales. El Juzgado de Instrucción número 4 de Zaragoza fue el encargado de llevar la causa, autorizando un registro en el domicilio familiar y requisando un disco duro de terabyte donde almacenaba el material pornográfico de sus víctimas.
Los investigadores, una vez intervenida su cuenta, descubrieron más de veinte chatas con niñas menores de edad con las que intercambiaba todo el contenido. Al tratarse de un menor (en el momento de los hechos tenía 17 años), la Fiscalía de Menores de Madrid dictaminó que, una vez terminasen los trámites policiales, fuera puesto en libertad, según informó la Policía Nacional.