Este es el té más caro del mundo: ha llegado a superar el precio del oro

El té es una de esas bebidas que, aunque no sea especialmente común en nuestro país, prácticamente todo el mundo la ha probado alguna vez, ya sea por cuestiones culturales a la hora de realizar un viaje a algún país donde se consuma habitualmente, como puede ser Inglaterra o Marruecos, bien por curiosidad o simplemente, por gusto.

Entre los factores que permiten que esta bebida, que se consume caliente por norma general, esté al alcance de todo el mundo, se encuentra su precio, ya que el té se caracteriza por ser una bebida particularmente asequible y barato. Pero no todos los tipos de té son iguales. Ni mucho menos.

Al igual que ocurre con el pescado, la carne o en el caso de las bebidas, el vino o bebidas con cierta graduación alcohólica, los hay de infinidad de tipos: más baratos o más caros, de mayor o menor calidad, más suaves o más agresivos al paladar, etc. Y el té no es una excepción.

Y es que, según se conoció a finales del año pasado, el té más valorado en el mundo está al alcance de muy pocas personas en el mundo, ya que, salvo que seas un fanático de esta bebida, es realmente complicado poder tener acceso a él. Se trata del té Da Hong Pao, una variedad oolong natural de la región de Wuyi, en Fujian (China), y cuyo valor asciende a nada menos que 30.000 euros/kg, por lo que su precio es más caro que el del oro.

Pero, ¿a qué se debe este elevadísimo valor? La respuesta la encontramos en las hojas necesarias para su elaboración, las cuales son muy complicadas de recolectar, ya que provienen de unos arbustos originales seleccionados por el emperador, los cuales fueron marcados con un manto rojo, de ahí su nombre Da Hong Pao (Manto Rojo).

Se puede conseguir en algunas zonas de Europa

Por si fuera poco, lo que las hace tan exclusivas y especiales es su escasez, que unida a su gran demanda y a una calidad excepcional, convierten a la variedad Hong Pao en el té más caro y único del mundo con mucha diferencia respecto al segundo.

Otra de las peculiaridades que presenta se encuentra en que este té no se comercializa en ningún lugar fuera de Asia. Es cierto que se puede conseguir su variedad en algunas zonas de Europa, pero estas son descendientes de las cepas originales, un factor que les resta gran parte de la exclusividad antes comentada.

Como es de esperar, este té es altamente valorado en la cultura china, utilizado a menudo como un regalo muy especial que se puede realizar en momentos muy puntuales y de gran trascendencia en la vida.