El mejor fertilizante para las fresas es algo que tiras a la basura cada día

El mejor fertilizante para las fresas es algo que tiras a la basura cada día

La temporada empieza en mayo y el abono casero es sencillo de hacer y gratis

Fresas de Huelva, recién recogidasAFP via Getty Images

Si te encantan las fresas, no dudes en ponerte manos a la obra y hacerte con tu propia cosecha para todo el año. Los profesionales de jardinería dicen que se trata de los cultivos más fáciles de cuidar, por lo que es ideal para principiantes. Y la clave de que tengas éxito, que es ponerle a tu cultivo un buen abono, te saldrá prácticamente gratis.

Parece ser que el mejor abono para las fresas es algo que seguramente tiras a la basura todos los días: los posos de café. Esta planta da fruta durante todo el verano si recibe los adecuados nutrientes. Y es fácil dárselo con esta sencilla receta para hacer el abono líquido para tus fresas.

Sólo vas a necesitar una taza de posos de café, que puedes ir guardando cada día porque no importa que se sequen. Luego, cinco litros de agua y un cubo. Simplemente tienes que espolvorear los posos de café en el agua y mezclarlos bien. Riega con esa mezcla tu cultivo.

La temporada de fresas empieza en mayo, así que es buen momento para que empieces. Debes regarlas con tu abono casero cada 15 días. Y querrás saber porqué precisamente se recomienda esta mezcla. La clave está en que los posos de café son ricos en nitrógeno, que favorece el crecimiento de hojas y tallos, lo que es especialmente importante para la salud de las plantas. Este abono aporta a la planta de la fresa minerales, como el potasio y el fósforo, esenciales, entre otras cosas, para la formación de los frutos.

Otra ventaja de los posos de café es que son ligeramente ácidos. Y es que las fresas prefieren suelos ligeramente ácidos, con un valor de pH entre 5,5 y 6,5 y esos posos ácidos ayudan a bajar el valor de pH del suelo.

Otros consejos para que te salgan unas frutas espectaculares son que debes plantarlas en un lugar soleado, ya que necesitan al menos seis horas de luz solar directa; mantén la tierra siempre húmeda, pero evita que se encharquen, regándolas siempre a primera hora de la mañana para que aguanten bien el calor y se sequen y hazlo a menudo, pero con un buen drenaje.

Además, los profesionales de jardinería aconsejan que, cuando las plantes les pongas debajo una capa de paja, que haga de colchón con el suelo y ayude a retener la humedad a la vez que protege también a las raíces. 

Y, finalmente, los dos otros aspectos que no se te deben olvidar son que, al plantarlas no estén demasiado juntas para que circule el aire y evitar enfermedades, así como cortar los brotes largos o estolones, que les sale a estas plantas y que están desnudos, para que concentre toda su energía donde debe: en que salgan las fresas y crezcan las raíces de la planta.