El estacionamiento del Hospital del Mar, en la ciudad italiana de Nápoles, se ha venido abajo este viernes. El accidente no ha dejado ningún herido, aunque sí daños materiales en varios coches que estaban aparcados en el recinto.
La foto oficial ya está hecha, pero la realidad es que sólo abre uno de sus pabellones, que todavía falta personal y que no ha llegado ni un solo paciente.
A los sanitarios no les salen las cuentas: "Les interesa vender que van a construir un hospital, pero ni siquiera han planificado cómo lo van a dotar".
Un grupo de chicas de La Plata, en Argetina, alquilaron una grúa para poder ver a su amiga que se encuentra hospitalizada por cáncer. Las restricciones frente a la pandemia les impiden visitarla en el interior del centro, pero encontraron la forma de apoyarla desde la ventana.
Una multitudinaria presencia de empleadas del centro se ha posicionado a las puertas manteniendo distancia de seguridad y bajo la pancarta principal ‘En defensa de lo público'.