Tu pareja no puede y no debería serlo todo en tu vida. Tienes que tener un mejor amigo o tres con los que no estés casado. Ojalá me hubiera dado cuenta antes de lo sola que estaba en mi matrimonio y de lo necesarios que son los amigos.
El amor no es mutuamente excluyente y los seres humanos no son reemplazables. No es que haya pasado página, es que sigo adelante. Estoy escribiendo capítulos nuevos de mi vida con un hombre que tiene la capacidad emocional y la comprensión necesarias para ser el hombre que vino después.
Al fin y al cabo, ¿qué es una cita? ¿Un encuentro organizado en el que comes y bebes para sacar información de la otra persona y decidir si te gusta? No soy un animal de zoo. Soy un maldito unicornio salvaje, inquieto y curioso, y mi actitud ante la vida es un reflejo de mi actitud en las relaciones: voy a por todas.
Mi yo de hace un año esperaba que me casara con 29 y que tuviera un bebé a los 30 porque era lo que parecía que la sociedad y la familia esperaban de mí. Mi yo de hace un año también era una idiota que casi no se va de viaje por el hecho de estar en una relación abusiva...
Estás más buen@ que ç*%$, me encanta cuando hablamos y cuando callamos, me has hecho reír tanto que casi me meo encima, hoy odio a todo el mundo pero a ti te soporto, te quiero más que a los regalos de Navidad...
Las parejas más felices comparten algunos hábitos que contribuyen a que lleven una vida basada en el bienestar y la armonía. Construyen su amor a partir de pilares tan sólidos y robustos como el respeto, la admiración, la igualdad, la complicidad, la transparencia o la confianza.
¿A veces tienes la sensación de que te encuentras en situaciones ligeramente mosqueantes? Te aconsejo que te quites las gafas de color de rosa y prestes atención a las siguientes señales. Tu cordura (y la gente que se preocupa por ti) lo agradecerá.