Sánchez defiende en Suiza "el Derecho Internacional" frente a la agresión rusa y afirma que España seguirá apoyando a Ucrania hasta el final

Sánchez defiende en Suiza "el Derecho Internacional" frente a la agresión rusa y afirma que España seguirá apoyando a Ucrania hasta el final

El presidente del gobierno ha participado en la cumbre por la Paz celebrada en Suiza, donde han acudido más de 90 líderes internacionales. No han estado presentes representantes de Rusia ni China.

Zelenski y Sánchez durante su encuentro en La MoncloaPablo Blazquez Dominguez

En las últimas horas, el epicentro político a nivel global se encuentra en Suiza, donde los líderes mundiales se han dado cita para abordar la situación de Ucrania cuando se cumplen dos años y medio desde que se iniciara la invasión rusa, y que ha contado como no podía ser de otra forma, con la presencia del presidente ucraniano Volodimir Zelenski, quien ha recibido afectuosos saludos y abrazos por parte de sus homólogos.

La tónica dominante en el encuentro ha estado marcada por las contundentes y numerosas condenas contra Rusia y en esta línea se ha mostrado también el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, quien ha enviado un mensaje de unión y repulsa contra la actuación de Rusia.

Durante su intervención en la cumbre, el líder del Ejecutivo español ha querido dejar claro que hay principios que no son negociables, entre ellos el respeto a la soberanía de un país, como tampoco lo es que se pueda validar su agresión.

"Cualquier solución que valide una agresión o una anexión violenta no será sostenible. Sólo conducirá a un mundo más inestable y peligroso", subrayó en su intervención frente a los dirigentes de más de 90 países. De esta forma ha expresado Sánchez su rechazo al plan de Vladimir Putin para acabar con la guerra, ya que las condiciones interpuestas por el líder del Kremlin son, ante los ojos de los aliados de Ucrania, "inasumibles".

A su juicio, los líderes reunidos en Suiza deben evidenciar que están unidos en torno a valores fundamentales como el respeto a la soberanía, la independencia y la integridad territorial de todos y cada uno de los países.

Así, la máxima autoridad del gobierno de España demandó que se haga patente igualmente la defensa de que el Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario se aplican siempre y deben respetarse en todo momento.

"Se trata de principios universales que deben defenderse con firmeza, de manera coherente y consistente en todo lugar, en todo momento y sean cuales sean los actores implicados. Los principios son principios y, por tanto -apostilló-, no son negociables. Esta debe ser para él la base de una paz justa y duradera en Ucrania, cuyo presidente, Volodímir Zelenski, copreside este evento junto a la presidenta de suiza, Viola Amherd.

"Un país no puede invadir a su vecino. No puede anexionarse el territorio de otro país por la fuerza. Las amenazas nucleares son inaceptables”
Pedro Sánchez, presidente del Gobeirno

Por ello, Sánchez defendió mandar en la cumbre ese mensaje a Rusia pese a que los principales asuntos que está previsto abordar en ella son algunas consecuencias globales del conflicto como la crisis humanitaria, el agravamiento de la crisis alimentaria y el temor a una catástrofe nuclear, ante las que dijo que España se ha comprometido con políticas y recursos a tratar de mitigarlas.

Además, elogió "el heroísmo y la resistencia" del pueblo ucraniano y de su Gobierno en la defensa de su país y garantizó que España continuará apoyando a Ucrania durante el tiempo que sea necesario.

"Porque una cosa está clara en este conflicto: hay un agresor, que es Putin, y hay una víctima, que es el pueblo ucraniano. En todos los conflictos hay que defender a la víctima y detener al agresor", añadió.

Añadió que puede resultar tentador culpar a otros de esta guerra, como Occidente o la OTAN, y que Rusia puede alegar que le preocupa la seguridad en relación con la situación en Europa y que esta inquietud es legítima. Sin embargo, resaltó que en todos los casos deben aplicarse ciertas normas básicas para mantener la coexistencia pacífica entre las naciones.

Reglas que precisó que son bastante simples y de las que dio varios ejemplos: "Un país no puede invadir a su vecino. No puede anexionarse el territorio de otro país por la fuerza. Los alimentos no son un arma. Las amenazas nucleares son inaceptables”.

Si no se defienden con firmeza estas reglas, advirtió de que no hay orden internacional y el caos llevaría a que el mundo estuviese sometido al dominio de los más fuertes, algo que calificó de inadmisible.

El presidente del Gobierno confió en que la cumbre contribuya a crear un consenso a partir del cual pueda discutirse una futura solución con todos los actores relevantes, incluida Rusia. "Es hora -subrayó- de que logremos la paz justa y duradera que Ucrania y el mundo merecen".

Una cumbre sin precedentes: amenaza nuclear, crisis alimentaria y multilateralidad, entre otros asuntos

En lo que respecta al resto de líderes internacionales, la cumbre ha estado marcada por la preocupación de muchos de los 90 países representados en la cita, ante la amenaza nuclear que Rusia ha deslizado varias veces desde que se desató el conflicto. Algunos como Japón otorgan una importancia capital a esta posibilidad, pero no ha sido el único tema a debate.

Por primera vez, países de los más diversos horizontes y representando a todas las regiones del mundo expusieron sus distintas visiones y preocupaciones frente a la guerra en Ucrania.

Otro asunto que ha protagonizado intensos debates ha sido el referente a la crisis alimentaria en África por la interrupción de las exportaciones de cereales de Ucrania y de fertilizantes de Rusia, así como el aumento de los costes de las importaciones en Latinoamérica y la amenaza existencial que para los europeos representa esta guerra salieron a relucir en las intervenciones de una treintena de líderes políticos.

Cada quien -desde las perspectiva de su situación geográfica, de sus lazos comerciales o económicos con Ucrania o Rusia y de sus propias historias de conflictos y colonialismo- planteó cómo ven la salida de esta conflagración, que ha dejado decenas de miles de muertes entre las fuerzas combatientes y varios miles en la población civil.

Negativa general ante la propuesta de paz de Putin

Estados Unidos volvió a garantizar a Ucrania que seguirá a su lado, apoyándolo económica y militarmente, reconociendo que "una paz justa" en Ucrania representa un "interés estratégico" no solo para Washington, sino también para el resto del mundo.

En esa línea, la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, dijo que la propuesta lanzada en las últimas horas por el presidente ruso Vladímir Putin -relativa a que aceptaría un alto el fuego si Ucrania se retira por completo de los territorios que Moscú ocupa ilegalmente- demuestra "que él no busca negociar, sino una rendición" de los ucranianos.

La cumbre, que contó con una participación masiva de países europeos, fue convocada por Suiza a petición del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien apeló a la multilateralidad y a la unidad global en torno a los principios de la Carta de Naciones Unidas para poner fin a la guerra y lograr una “paz justa”.

"(La guerra no puede alargarse indefinidamente) porque es peligroso y no es sostenible ni para Ucrania ni para Europa"
Olaf Scholz, canciller alemán

Los líderes políticos europeos coincidieron, de una u otra manera, en que no se puede dejar pasar la ambición de Rusia de quedarse con territorio ucraniano, pues la historia ha demostrado que ceder suelo por paz solo aumenta el apetito imperialista y el riesgo de agresiones a otros países.

No obstante, también hubo coincidencia en que no se puede aceptar que esta guerra se prolongue indefinidamente, "porque es peligroso y no es sostenible ni para Ucrania ni para Europa", recalcó el canciller alemán, Olaf Scholz.

El primer ministro británico, Rishi Sunak, animó a mantener el apoyo incondicional a Ucrania, porque la rendición que espera Putin "nunca ocurrirá", mientras que el presidente francés, Emmanuel Macron, consideró igualmente que solo con la ayuda de sus aliados Kiev podrá resistir a la capitulación.

Kenia y Ghana señalan a Occidente

Por Estonia, la primera ministra Kaja Kallas recordó, con una vivencia familiar, que Rusia no ha pasado página a su historia imperialista, que su país sufrió durante medio siglo y de la que su madre, deportada siendo bebé a Siberia, fue una víctima directa.

Del lado latinoamericano, el presidente chileno Gabriel Boric defendió que por respeto a la legalidad y no por cuestiones ideológicas hay que estar con Ucrania, pues en esto se está jugando la supervivencia del sistema internacional, mientras que su homólogo argentino Javier Milei consideró que la paz está directamente relacionada con el comercio y la prosperidad.

Más sobre el terreno fueron las intervenciones de los mandatarios de Kenia y Ghana, que recordaron que las empobrecidas poblaciones de sus países han sufrido directamente este conflicto por el aumento desmedido del precio de los cereales y de los fertilizantes para las labores agrícolas, lo que ha dado lugar a crisis alimentarias en varias partes de Africa.

El presidente keniano William Ruto fue el único que hizo una crítica a los países occidentales presentes en la sala, señalando que se habían apropiado de forma ilegítima de los activos rusos y que esto era tan reprensible desde el punto de vista legal como la agresión de Rusia contra Ucrania.

Titania
Titania
Santander

La cumbre continuará este domingo con mesas redondas en las que los presidentes y delegaciones de un centenar de países intentarán plantear propuestas claras para reducir el riesgo nuclear por esta guerra, encontrar vías para que impacte menos en la seguridad alimentaria y plantear ideas en favor de los prisioneros de guerra y para que los adultos y niños deportados por Rusia a los territorios que controla sean devueltos a Ucrania.