Un simulador muestra las consecuencias de una bomba atómica en Madrid
El presiden ruso aseguró que Moscú "está preparado desde el punto de vista técnico" para una guerra nuclear.
La guerra rusa en Ucrania, desatada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, hace más de dos años, ha reabierto los temores a una guerra nuclear. Hace dos semanas, el presiden ruso aseguró que Moscú "está preparado desde el punto de vista técnico" para una guerra nuclear y afirmó que las capacidades con las que cuentan las fuerzas rusas son "más modernas" que las del resto de países del mundo.
"Desde un punto de vista técnico y militar, estamos preparados, desde luego", dijo durante una entrevista a la cadena de televisión Rossiya 1 y a la agencia RIA Novosti. "Las tropas están en un estado constante de preparación para el combate", agregó. Putin advirtió entonces de que "las armas existen para ser usadas" y reiteró que Moscú mantiene "sus propios principios" para determinar su utilización.
Tras el inicio de la guerra y la reapertura del debate ante el temor de una posible Tercera Guerra Mundial, varios medios, entre ellos El Español, difundieron NUKEMAP, el simulador de explosiones nucleares más avanzado, desarrollado por Alex Wellerstein en conjunto con el College of Arts and Letters del Instituto de Tecnología Stevens de Estados Unidos.
Este simulador permite saber desde las bajas (aproximadas) que provocarían estas bombas hasta el radio de acción de las mismas en ciertas zonas del mundo. Para ello, cuenta con un arsenal de bombas para probar en el simulador: las opciones más potentes son las de la Bomba del Zar, de 50 y 100 megatones.
Así, el mismo medio se preguntó que pasaría si se lanzara una de estas bombras sobre Madrid, y los datos son devastadores: casi 4 millones de muertos, y más de un millón de heridos en tan solo 24 horas.
El resultado de usar la Bomba del Zar en pleno centro de Madrid implicaría un radio de radiación térmica -quemaduras de tercer grado- de 60 kilómetros, con 11.300 kilómetros cuadrados de superficie. Los anillos, que muestran las explosiones ligeras, moderadas y fuerte, quedan así:
- Explosión ligera: 54,3 kilómetros de radio, 9.270 kilómetros cuadrados.
- Explosión moderada: 20,7 kilómetros de radio, 1.350 kilómetros cuadrados.
- Explosión fuerte: 8,91 kilómetros de radio, 249 kilómetros cuadrados.
Las cifras exactas de heridos y de muertos -que NUKEMAP insiste en que son meramente orientativas- sería de 3,84 millones de muertos y 1,24 millones de heridos. Además, explican que en cualquier período de 24 horas, 6,38 millones de personas estarían en el radio de la explosión ligera.
De esta forma, el radio exterior de la radiación térmica pasaría holgadamente por Guadalajara y arrasaría con Alcalá de Henares, Alcobendas, Parla o Móstoles. Aunque las peores consecuencias se las llevarían Alcorcón, Leganés, Fuenlabrada y Alcorcón, que serían alcanzadas por la explosión fuerte de la bomba.