El diminuto país pesquero europeo genera envidia por su sistema fiscal

El diminuto país pesquero europeo genera envidia por su sistema fiscal

Muy peculiar y eficiente.

Paisaje de la pequeña localidad costera de Bøur.Francesco Riccardo Iacomino via Getty Images

Los impuestos. Esa habitual queja para tantos cada año, pero esenciales para financiar los servicios públicos el Estado del Bienestar que todos disfrutamos cada día sin excepción. Si bien es cierto que la mayoría de países de nuestro entorno cuentan con un sistema fiscal muy similar al nuestro -aunque no coincida siempre en cantidades, tipos o destino final de los recursos-, hay países que a pesar de su tamaño despiertan cierta curiosidad sobre cómo funcionan los tributos.

De entre ese último grupo, hay una pequeña -vale, diminuta- nación pesquera cuyo sistema fiscal genera cierta 'envidia'. Pero hay que explicarlo. Se trata de las Islas Feroe,  estado semiindependiente de Dinamarca y localizadas entre Reino Unido, Islandia y Noruega. Con todo, tienen Gobierno y Congreso propios o selección de fútbol con aval de la UEFA. Pero lo que también tienen es un entramado tributario que ha sido elogiada incluso por países miembro de la Unión Europea. 

Destaca principalmente porque la mayoría de la ciudadanía no tiene que presentar impuestos y tampoco existen deducciones o créditos. No obstante, lo que de verdad despierta esa 'envidia' por su sistema fiscal es su gran característica. La eficiencia. La recaudación se realiza automática, así como el desembolso de ayudas, ante unos contribuyentes que no tienen que hacer nada.

La clave de la eficiencia fiscal

¿Por qué? En el titular está la clave. Estas características solo son posibles en una población a menor escala y las Islas Feroe apenas cuentan con 50.000 habitantes. Eso facilita que el Estado pueda calcular los impuestos al manejar mayor cantidad de información tributaria, bancaria o laboral y al tratarse de un país relativamente pequeño. También influye que la mitad del PIB de estas islas viene del sector pesquero. El 90% de las exportaciones la constituyen los productos acuícolas y pesqueros, en una Estado que parte, literalmente, el bacalao.