amanece que no es poco

Es el primer amanecista, y en su carné de identidad debería ponerlo. Quizá haya brotado en silencio de una huerta y no se lo haya confesado a nadie. Se lo debí preguntar, como él me interrogó cuando le llamé para pedirle la entrevista: "Pero, ¿por casualidad esto lo ve alguien?".

Cuerda tiene asegurado un bonito lugar en la memoria colectiva gracias a Amanece, que no es poco pero, como resulta frecuente cuando se da en el clavo de un modo tan espectacular, esta película ha eclipsado otros de sus logros: ser el impulsor del talento de Alejandro Amenábar o el responsable de El bosque animado y La lengua de las mariposas