El primer país que recibirá el 2024 se sitúa en los cuatros hemisferios y está condenado a muerte

El primer país que recibirá el 2024 se sitúa en los cuatros hemisferios y está condenado a muerte 

Su disposición geográfica y sus frecuentes inundaciones podrían provocar su desaparición.

Una vivienda de Kiribati, afectada por las subidas del nivel del mar.GETTY

Ya ha empezado la cuenta atrás para el 2024. Todo está acondicionado para que el reloj de la Puerta del Sol cumpla con su cometido de cada año para disfrutar del momento de las campanadas y darle la bienvenida al Año Nuevo. 

La mencionada Puerta del Sol en Madrid, Times Square en Nueva York o Copacabana en Río de Janeiro son algunos de los escenarios en los que se celebra esta entrada en el nuevo año por todo lo alto. No obstante, dadas las diferentes horarias, no todos los hacen al mismo tiempo. 

Se tiene la conciencia de que Australia es el primer país que entra en el año. Los fuegos artificiales vistos en Sídney y más concretamente el Puente de la Bahía y la Casa de ópera cada 1 de enero tiñen la ciudad de luz y color. Pero, en contra de lo que en un primer momento se puede pensar, no es el primer país que celebra el Año Nuevo en el mundo. 

Kiribati, el remoto país que será el primero en entrar en 2024

El primer país que recibirá el 2024 será Kiribati, una república situada en las Islas Caroline, al noreste de Australia, en pleno océano Pacífico, que tiene la particularidad de que comparte tierra con cuatro hemisferios diferentes. 

Situada en la zona horaria más avanzada del mundo (UCT+14), de ahí que entre en el 2024 antes que cualquier otro país, tiene poco más de 800 kilómetros cuadrados de tierra firme, siendo el espacio con más superficie la isla Kiritimati, apodada como la "Isla de Navidad" y lugar de asentamiento temporal de los polinesios. 

Avocada a la desaparición

No obstante, este dato de superficie habitable choca con la del total del país, 3,5 millones de kilómetros cuadrados, una diferencia más que notable que se explica debida a la amplia distancia entre cada una de las islas que conforman la nación.

A estos problemas de distribución geográfica se les suma otros de índole medioambiental que podrían provocar su desaparición. Debido a su escasa altura sobre el nivel del mar -Kiribati está situado a tan solo 3 metros-, el cambio climático y las consecuentes inundaciones diarias están haciendo mella entre sus habitantes.

De acuerdo al medio Billiken, se calcula que más del 80% de la población del país se ha visto afectado por la subida del nivel del mar y los expertos estiman que será el primer país del mundo en desaparecer bajo el agua. Los pronósticos hablan que el trágico suceso podría ocurrir en los próximos 100 años.