La entrevista del príncipe Harry y Meghan Markle con Oprah Winfrey marcó un antes y un después en sus relaciones con la casa real británica, de la que a principios de 2020 decidieron marcharse. Sin embargo, las desavenencias entre el hijo menor de Carlos de Inglaterra y Lady Di y su hermano mayor, el príncipe Guillermo, vienen de antes.

Un libro recién publicado, Battle of Brothers: William, Harry and the Inside Story of a Family in Tumult, del experto real Robert Lacey, asegura que el detonante principal fue el escándalo protagonizado por Meghan Markle, a la que varios trabajadores del Palacio de Kensington acusaron en 2018 de intimidación e incluso, de acoso y bullying.

Según el autor de libro, como recoge US Weekly, el príncipe Guillermo se puso furioso al enterarse del dossier que el exsecretario de comunicaciones, Jason Knauf, había elaborado sobre el tema. Se quedó “asombrado y horrorizado”, además de preocupado acerca de que la actriz estadounidense pudiera estar “socavando algunos principios de la monarquía”.

Por su parte, Harry se puso igualmente furioso porque, en su opinión, su hermano creía más a los miembros del personal que a su propia familia. Se puso del lado de su mujer y Guillermo se sintió “traicionado”, según Lacey.

Hasta ese momento, Guillermo había asumido como “su trabajo” el cuidar de Harry, “pero ese era el momento de que esa protección parara”. “Guillermo simplemente no quería que Harry o ella siguieran alrededor”, asegura el experto.

Escalada de tensión

La entrevista de Harry, así como el documental de salud mental que protagoniza junto a Oprah Winfrey, han añadido más leña al fuego, porque Guillermo es de la opinión de que su hermano no debería airear ciertos asuntos familiares en público. “No va a volver a confiar en él nunca más. El daño está hecho”, aseguró una fuente a la revista.

Según apunta ¡Hola!, Lacey afirma también que no hubo una conversación privada entre ambos aprovechando su asistencia al funeral del duque de Edimburgo, tan solo la breve charla sobre la misa que captaron las cámaras. Los Cambridge evitaron hablar con los Sussex por si el contenido de la conversación se filtraba a la prensa.

El 1 de julio se les verá juntos de nuevo: será en Londres en un acto por el que hubiera sido el 60º cumpleaños de su madre y al que ya se sabe que no acudirá Meghan Markle.