La crisis del clima: una oportunidad única para hacer del mundo un lugar más justo
La desobediencia no nos insensibiliza ni nos convierte en hooligans. Es nuestro deber para con aquellos que ahora sufren y que tienen mucho que perder si perdemos esta carrera contrarreloj por la justicia climática. Además de unirnos para rechazar las peligrosas ofertas de futuro que nos hacen los gobiernos y las empresas que los financian, tenemos que dar un paso y decir "no".