Detenido en Bilbao un presunto colaborador del comando Vizcaya de ETA
La Guardia Civil ha detenido la madrugada de este martes a un presunto colaborador del comando Vizcaya de ETA, Asier González Soreasu, en su domicilio de Bilbao, lugar que ha sido registrado y donde se ha incautado también de diverso material.
La detención ha tenido lugar sobre las 02:00 en la calle Zabalbide del barrio de Solokoetxe, cercano al casco viejo de la capital vizcaína, según fuentes de la lucha antiterrorista. La operación ha sido posible gracias a un pendriveque encontró un ciudadano cuando reparaba la caldera de un piso que tuvo alquilado el comando en la localidad riojana de Ezcaray.
Ha sido la desencriptación y el posterior análisis de las informaciones que contenía lo que ha permitido incriminar al detenido, de 31 años, según las fuentes.
El detenido prestó colaboración al comando Vizcaya de ETA, desarticulado por la Guardia Civil el 22 de julio de 2008 en diferentes localidades del País Vasco.
EL OPERATIVO SIGUE ABIERTO
Tras más de cuatro horas de registro en el domicilio, los miembros de la Guardia Civil se han desplazado con González Soreasu a la 'herriko taberna' del barrio de Santutxu para inspeccionar también el local. Por el momento, el operativo policial sigue abierto.
El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha explicado en declaraciones a la COPE que el Gobierno sigue trabajando "hasta conseguir la disolución definitiva de ETA", dentro y fuera de España, y "ni negocia, ni ha negociado, ni va a negociar" con ella.
Para Fernández Díaz, el cese definitivo de la violencia no basta. "No queremos vivir contra ETA sino sin ETA", ha afirmado, y ha insistido en que el Gobierno trabajará "en el marco de la ley pero con toda la fuerza de la ley".
MIEMBRO DEL GRUPO MÁS ACTIVO
González Soreasu, presunto miembro de ETA, está acusado de colaborar con el comando Vizcaya, que fue desarticulado el 22 de julio de 2008 cuando Arkaitz Goikoetxea lo dirigía.
Este comando estaba considerado el grupo más activo de ETA desde la ruptura del alto el fuego el 30 de diciembre de 2006 con el atentado de la T-4 de Barajas.
A él se le atribuyen la mayoría de los atentados cometidos desde aquella fecha, entre ellos contra las casas cuartel de la Guardia Civil de Durango (Bizkaia), en agosto de 2007, en Calahorra (La Rioja), en marzo de 2008, y Legutiano (Álava), en mayo de 2008 y que costó la vida al agente Juan Manuel Piñuel.
