Cuidado a los intrépidos: pisar alguna de estas islas de ensueño equivale a firmar tu sentencia de muerte

Cuidado a los intrépidos: pisar alguna de estas islas de ensueño equivale a firmar tu sentencia de muerte

Prohibido acercarse a este archipiélago del Índico.

Imagen de Sentinel del Norte.DIGITALGLOBE/SCAPEWARE3D

John Allen Chau, un bloguero y misionero evangélico de Estados Unidos, nació en Scottsboro, Alabama, el 18 de diciembre de 1991. Era el tercer hijo de una familia cristiana y un apasionado por la aventura y las misiones. De hecho, viajó a México e Indonesia cuando era adolescente para echar una mano en proyectos de desarrollo local.

En 2015, Chau se quedó prendado de la forma de vida de una de las últimas tribus indígenas no contactadas que todavía existen en el mundo: los sentineleses. Aprendió su idioma, su cultura y se fascinó por su aislamiento del mundo exterior. Tanto, que creyó que podía llevarles el evangelio y que lo aceptarían en su tribu. Sin saberlo, Chau había firmado su sentencia de muerte.

En noviembre de 2018, Chau viajó ilegalmente a Sentinel del Norte, una de las 300 islas que forman parte del archipiélago de las Andamán, muy cerca de la costa de la India, y en la que viven los sentineleses. Consciente de que las leyes de protección de las tribus indígenas prohíbe el acceso a los forasteros, Chau pagó a varios pescadores de la zona para que lo llevasen hasta allí, decidido a propagar su religión.

Pero tuvo que completar el viaje hasta la isla de los sentineleses solo, a bordo de un kayak. Una vez allí, Chau intentó establecer contacto. Según el podcast Despierta tu Curiosidad de National Geographic, les gritó "me llamo John. Te amo. Jesús te ama". Los sentineleses, sin embargo, se volvieron hostiles y le dispararon flechas y lo ahuyentaron.

John, convencido de que su misión en esta vida era la de evangelizar a los sentineleses, volvió varias veces a Sentinel del Norte. Tantas, que hasta la tribu se acostumbró a su presencia. En su última visita, el 17 de noviembre de 2018, los miembros de la tribu volvieron a atacarlo. Esta vez, Chau no logró escapar y acabó muriendo. Los pescadores que lo acompañaban hasta ese paraíso del Índico, vieron como lo enterraban en la playa.

La muerte de Chau generó una gran controversia. Algunos lo elogiaron por su valentía y determinación, mientras que otros lo criticaron por su falta de respeto por la cultura y la autonomía de los sentineleses. El gobierno indio ha impuesto desde entonces la prohibición de visitar la isla Sentinel del Norte y ha reforzado la protección de la tribu.