Los motivos del 'pinchazo' de la campaña de vacunación antigripal tras la ola de contagios

La ola de gripe que todavía sigue haciéndose notar en España parece haber remitido levemente en la última semana. Las últimas cifras registradas por el Ministerio de Sanidad reflejan la primera caída en cuatro semanas de la incidencia acumulada en Atención Primaria. 

En el informe que se publicó este jueves, el departamento que lidera Mónica García apunta a una bajada de las infecciones respiratorias en diez comunidades autónomas, aunque también señalaba el incremento en otras tres, Aragón, Cataluña y Navarra.  

Pero, antes de que los medios de comunicación hablaran del preocupante crecimiento de los contagios, el pasado mes de octubre, las diferentes administraciones, tanto autonómicas como estatales, pusieron en marcha una campaña de vacunación que ha sido todo lo contrario a un éxito.

Lejos del objetivo

La comisión de Salud Pública aprobó el pasado 12 de septiembre una serie de recomendaciones acordadas para fijar las directrices de cara a la campaña de vacunación que arrancaba un mes después en casi todo el país.

En dicho documento, se hablaba de algunos de los objetivos, como el de "reforzar la protección de las personas más vulnerables y del personal sanitario y sociosanitario para reducir la morbimortalidad y el impacto de estas enfermedades sobre la capacidad de la atención sanitaria y sociosanitaria".

Sanidad aconsejó vacunarse durante la temporada de otoño-invierno a "los grupos de población diana": personas de 60 años o más, de 5 años o más o más internas en centros de discapacidad y residencias de mayores, embarazadas en cualquier trimestre de gestación y mujeres hasta 6 meses después del parto, así como los que vivan con personas inmunodeprimidas.

También recomendaron a otro grupo de personas que se protegieran contra la gripe y el covid. En concreto, al personal de centros y establecimientos sanitarios y sociosanitarios públicos y privados y a aquellos que trabajan en servicios públicos esenciales, como fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, bomberos o servicios de protección civil.

Sanidad fijó como objetivo en la campaña de vacunación superar coberturas del 75% en mayores y en el personal sanitario y sociosanitario, además de sumar más de un 60% en el caso de embarazadas y personas con condiciones de riesgo.

Pero los avisos de las diferentes administraciones no han logrado el efecto deseado y, tras la ola de gripe que sigue tensionando los centros sanitarios estas últimas semanas, ha quedado patente que la campaña ha estado llena de grandes deficiencias.

Cifras lejanas a lo esperado

En noviembre, ya había algunas voces de alarma importantes que señalaban la falta de ganas de muchas personas a acudir a su centro de salud para protegerse contra los diferentes virus.

El Observatorio de vacunación antigripal en España 2023 avisó de que sólo el 44% de la población española tenía la intención de vacunarse, cinco puntos por debajo de lo que reflejó la misma encuesta en 2022.

Una de las críticas que apareció en dicho análisis fue la de la falta de información. Un 80% de los preguntados aseguró que no tenía información suficiente para considerar necesaria su vacunación y explicaron que su principal fuente de información eran los medios de comunicación.

Unas advertencias que no fueron suficientes para que las diferentes administraciones apostaran por la concienciación durante las semanas posteriores y que han sido la antesala a los datos que se han registrado hasta la fecha.

Las cifras provisionales apuntan a que sólo un 65% de la población mayor de 65 años se ha vacunado de la gripe. Mientras que, según las estadísticas del Gripometro, seguimiento semanal que suele hacer Sanofi, sólo hay dos comunidades que han superado el 75%, Navarra y La Rioja. Algo que contrasta con el 50% de las Islas Canarias, el 52% de las Islas Baleares o el 54% de Cataluña.

Un "río desbordado" del que hablaba la ministra de Sanidad, Mónica García, en una entrevista en el programa de Telecinco, Mirada Crítica, antes de justificar que "vamos a valorar si ha habido un relax a la hora de hacer la campaña de vacunación o si la población, como el covid ya es más leve, da por hecho que la gripe no necesita estas medidas".

Las cosas que han fallado

Daniel López Acuña, epidemiólogo y exdirector de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS), reconoce que desde que empezaron a ponerse las primeras vacunas ha habido varios errores por parte de las administraciones.

Aunque resalta que el crecimiento de los contagios visto en las últimas semanas "es un fenómeno que se da en toda Europa" cree que hay "tres factores" principales.

"Las autoridades sanitarias tendrían que haber hecho una campaña más intensa de información pública de pedagogía social, para señalar que había que vacunarse. Por ejemplo, con los niños. Ha fallado el esquema de educación sanitaria", enumera en primer lugar.

Daniel López Acuña cree que "falló la estrategia de vacunación". "Era pasiva, que las personas fueran conscientes de que tenían que ponerse la vacuna del covid y la gripe. Es dar demasiadas cosas por sentado. Tendrían que haber llamado a las personas que están en grupo de diana, con vacunaciones masivas, en días especiales", añade.

El exdirector de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS) también resalta un tercer ápice, el de la "fatiga de todo el mundo", incluidos los profesionales sanitarios y responsables. "No hay que bajar la guardia. Por eso deberían haber dado los dos pasos anteriores. No tener que esperar hasta ahora", razona.

El epidemiólogo también pone en valor que la respuesta por parte de algunas regiones ha sido buena, como Asturias, que "instalará puestos de vacunación sin necesidad de cita" e invita a seguir los mismos pasos porque "todavía quedan meses de invierno".

Respecto a la coberta de vacuna de gripe, Daniel López Acuña cree que "hemos sido demasiado tibios" en las acciones de vacunación y ahora es el momento de "lamentarlo". "La base es fortalecer la vacunación y recuperar la mascarilla en centros sanitarios. Hemos sido demasiado laxos", justifica.

El exdirector de Salud Pública de la OMS destaca la decisión de Sanidad de recuperar la mascarilla en los centros sanitarios y, de hecho, aconseja a la población a seguir usándola en lugares concurridos, como, por ejemplo, el transporte público. "Va a ayudar a frenar contagios", valora.

Tras la leve caída de la incidencia, ahora llega el momento de reforzar los mensajes enviados a la población diana sobre la importancia de protegerse contra el virus y algunas comunidades ya están tratando de recuperar el terreno perdido por la preocupante ola de contagios que se ha hecho notar en España.