Un estudio confirma que una de las bebidas más consumidas en España alarga la vida

Un estudio confirma que una de las bebidas más consumidas en España alarga la vida

Ello se debe a la presencia del harmol entre sus componentes, también presente en la carne y el pescado.

Un pareja disfrutando de un caféPortra ehf.

Uno por la mañana, para arrancar bien el día. Otro, después de comer. Con amigos o para afrontar una dura y larga tarde de trabajo. Estamos hablando del café, el gran aliado de muchos y la pesadilla de otros. Esta bebida, que es una de las más consumidas en España, es objeto de debate para médicos y especialistas en nutrición. Ahora, un grupo de expertos liderado por el Instituto Imdea Alimentación ha demostrado que tiene un componente que alarga la vida.

Se trata del harmol. Es un compuesto que pertenece a la familia de las betacarbolinas y está presente en el café además de en otros productos de consumo diario, como el pescado, la carne, los cereales e, incluso, en las hojas de tabaco. Aunque, según detallan los científicos, el harmol no ha mostrado "ninguna toxicidad y muy escasos efectos sobre el sistema nervioso central".

El estudio, desarrollado por la entidad española, detalla cómo beneficia este compuesto las funciones del músculo esquelético, la tolerancia a la glucosa, la acumulación de lípidos hepáticos en un modelo de prediabetes, así como la sensibilidad a la insulina. Todos ellos, parámetros relacionados con la calidad de vida. Para poder averiguarlo, han analizado cómo el tratamiento con harmol ha prolongado la longevidad de dos modelos de invertebrados.

Además, en el es estudio, se ha observado que produce una reducción "muy significativa" de la fragilidad en los "animales viejos". Es decir, que los organismos longevos que se han sometido a un tratamiento con harmol tienen mayor capacidad para afrontar el día a día de manera autónoma y con más facilidad. Esto se traduce en un menor riesgo de enfermedades, hospitalización y fallecimiento.

Un mecanismo parecido al de la felicidad

El principal responsable del estudio, el doctor Pablo J. Fernández-Marcos, ha explicado que el mecanismo que sigue el harmol es similar al de la felicidad. "Con el harmol hemos descubierto que este efecto de mejora mitocondrial lo llevan a cabo las células mediante mecanismos parecidos a los que nos hacen sentir más felices", ha explicado. Ello responde a que "comparten las mismas proteínas diana", ha apostillado.

"Esto abre un campo de investigación muy interesante", continúa relatando Fernández-Marcos, acerca de la "asociación entre el estado psicológico y el envejecimiento".