Este resultado, aún no aceptado ni por la derecha independentista de Puigdemont, ni por la derecha "pro-procés" del Partido Popular, sin duda, es fruto de un trabajo incansable y resiliente del PSC.
El presidente del Gobierno valora que "es imperativo apelar a la responsabilidad de los partidos para que haya un nuevo Govern" y pide al PP reflexionar, en una entrevista en 'Al Rojo Vivo'.
La presidenta madrileña saca pecho en la Asamblea de los resultados populares: "Illa, menos lobos… 873.000 votos frente al 1,6 millones del PP en Madrid".
El presidente de Esquerra, que anunció que dejará el cargo tras las europeas, explica que lo hará porque quiere buscar dicho aval "de igual a igual, a pie de calle" y deja la pelota de la gobernabilidad en el tejado de otras formaciones: "Que se pongan de acuerdo para gobernar".
La portavoz de los socialistas catalanes apunta a que la composición de la Mesa del Parlament "ha de representar la pluralidad que hay", con la vista puesta en una Presidencia de la cámara del PSC.
Con la excepción de la ultraderecha de Vox y Aliança Catalana e incluso con la vista puesta en un gobierno en solitario con apoyos externos. Desde Ferraz aseguran que "el Gobierno de Cataluña se decidirá en Cataluña. Ni en Madrid ni en ningún otro sitio".
El líder de los populares catalanes ha recalcado que "el mensaje de las urnas" ha sido "absolutamente incontrovertible" y que por lo tanto cogerá el teléfono al candidato socialista si le llama.
"No es lo mismo un Govern de obediencia netamente catalana que un Govern de obediencia independentista", advierte Laia Estrada a los postconvergentes, que
A pesar del choque inicial de Feijóo con el cabeza de lista, Alejandro Fernández, los populares cosechan un gran resultado y crecen en 12 escaños hasta situarse como cuarta fuerza del Parlament con 15.