Las Fuerzas Armadas busca urgentemente 47 cazas para 'jubilar' sus aviones de combate

Las Fuerzas Armadas busca urgentemente 47 cazas para 'jubilar' sus aviones de combate

El Ejército del Aire y del Espacio necesita un mínimo de 35 aparatos nuevos y la Armada, unos 12

Un militar español, en un F-18Corbis via Getty Images

La defensa española de los cielos necesita renovación. Las Fuerzas Armadas va a tener que hacer frente próximamente a un gran reto: la jubilación forzosa de una tercera parte de sus aviones de combate en los próximos cinco años. Muchos de sus modelos ya han quedado viejos o están apurando sus últimos años de vida. Esto provoca que el Ministerio de Defensa tenga que buscar urgentemente nuevos cazas para mantener su fuerza de combate.

Pero no es asunto sencillo. Tal como explican los periodistas Mateo Balín y Álex Sánchez en Diario Sur, el Ejército del Aire y del Espacio necesita un mínimo de 35 aparatos nuevos y la Armada, unos 12. "En ambos casos, porque los veteranos F-18 Hornet, comprados de segunda mano a las US Navy, y los característicos Harrier de despegue vertical, que han sobrepasado los 40 años de vida útil, tienen prevista su muerte operativa entre 2026 y 2028", señala el medio.

La sustitución de estos aparatos supondría una inversión de 10.000 millones de euros, una cifra de vértigo en el caso de que se adquieran los F-35 de Lockheed Martin, que vendrían a ser el relevo escalonado de los F-18 y de los Harrier.

El F-35A es el caza de quinta generación más potente de EE.UU y sus características lo convierten en uno de los aviones de combate más solicitados: diseño aerodinámico, aviónica integrada avanzada, sensores, sigilo de próxima generación, conciencia situacional... Además, está preparado para la guerra electrónica mejorada y dispone de capacidad avanzada de armas de quinta generación incluidos misiles de crucero JASSM y LRASM.

Dicha sustitución parece sencilla a falta del enorme montante económico. Sin embargo, Diario Sur señala que Defensa duda entre mantener la apuesta firme por la industria europea y el consorcio de Airbus, generador de empleo en nuestro país, o decantarse por la opción comercial de Lockheed Martin, que no supone retorno económico. Airbus y la francesa Dassault están actualmennte trabajando en un sistema aéreo de combate que está en fase de parón por el desencuentro entre las dos constructoras y que no llegaría a tiempo para sustituir los cazas españoles.

De momento, el único proyecto con luz verde por parte de Defensa es la adquisición de 25 cazas Eurofighter de cuarta generación para iniciar el reemplazo escalonado de los F-18 en el Ejército de Tierra hasta finales de esta década. Una medida aprobada por el Consejo de Ministros el pasado mes de septiembre que, sin embargo, no resuelve el problema de los 'cazas' pendientes de la jubilación.