Elecciones vascas 2024: todo lo que está prohibido hacer en las jornadas de reflexión

Elecciones vascas 2024: todo lo que está prohibido hacer en las jornadas de reflexión

Mientras que países como Alemania, Estados Unidos y Reino Unido son mucho más flexibles, en España tenemos estas restricciones.

Papeletas electorales con diferentes opciones políticas a las elecciones al Parlamento Vasco del 21 de abril.EFE / Luis Tejido

Este sábado 17 de febrero tiene lugar la jornada de reflexión de las elecciones vascas 2024. Se trata de una costumbre arraigada desde la transición democrática que ha sido acogida tanto por los medios de comunicación como por la tradición electoral del país a lo largo de los años.

Esta designación se basa en la Ley Orgánica 5/1985, del 19 de junio, del Régimen Electoral General, conocida como LOREG, que en su artículo 53 establece un periodo de prohibición de la campaña electoral, restringido al día anterior de las elecciones.

La normativa especifica que una vez finalizada legalmente la campaña electoral, no se puede difundir propaganda ni llevar a cabo ningún acto de campaña. Este lapso comienza 16 días antes de la votación, como indica el artículo 51, y concluye un día antes de las elecciones, marcando así las 24 horas previas como el período de reflexión.

Durante la jornada de reflexión, está prohibido solicitar el voto o realizar acciones de campaña. Además de los políticos, esta normativa también se extiende a otros actores políticos, incluidos los medios de comunicación. Publicar una entrevista a un candidato en la jornada de reflexión en un medio de comunicación se considera una violación de la LOREG.

Además de las entrevistas y los actos políticos, las encuestas sobre la intención de voto en España están prohibidas no solo durante la jornada de reflexión, sino también en los cinco días anteriores a las elecciones.

España se encuentra entre los países con mayores restricciones durante la jornada de reflexión, junto con Francia, Portugal e Italia, mientras que países como Alemania, Estados Unidos y Reino Unido son mucho más flexibles en este sentido, permitiendo la campaña hasta el último momento, lo que sería impensable según la concepción de la libertad de expresión en esos países.