Como cada año, llega junio y llega Ascot. Esta competición ecuestre es célebre por sus caballos, obviamente, pero también por la asistencia de la reina Isabel y de buena parte de la familia real… y por sus tocados.
A principios de 2012 el célebre hipódromo británico endureció sus reglas de protocolo: se prohibieron las minifaldas (el largo, por debajo de la rodilla), los vestidos y camisetas sin tirantes, las grandes transparencias y los pantalones cortos. Lo más curioso es que se prohibieron también los tocados, por lo que las señoras tenían que cubrirse la cabeza exclusivamente con sombreros (como hace la propia monarca, sin ir más lejos). Solamente se admitían aquellos que tuvieran una base de al menos 10 centímetros de diámetro.
Sin embargo, cuatro años después parece que la actitud se ha relajado. Los tocados, aquellos que algunos sombrereros —entonces felices— denominaban "una flor barata y tres plumas recogidos con una cinta", parecen estar de vuelta en todo su esplendor. Tocados, sombreros o como quieran que se llamen esas locuras, llenan este año más que nunca un hipódromo desbordado de tules, plumas y chismes en general adornando las cabezas.
Es difícil decidir cuál es el mejor-peor sombrero de los vistos en Ascot. La selección es complicada. En cualquier caso puedes votar en esta lista para quedarte con el tocado más loco de todos. Si te quedas con ganas de más, abajo tienes una galería completa.
