Bescansa señala cuál puede ser el futuro de Casado y Margallo reacciona rápido
La que fuera dirigente de Podemos lo tiene claro.
La guerra en el Partido Popular sigue su curso y tras desatarse el pasado jueves ante el supuesto caso de espionaje por parte de la dirección nacional a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, este lunes siguen las hostilidades con el futuro de Pablo Casado, presidente del PP, en duda.
Ante las informaciones que dan como amortizado a Casado y un posible cambio de Alberto Núñez Feijóo en Génova 13, la que fuera diputada y número 3 de Podemos, Carolina Bescansa, ha puesto el análisis en el futuro del actual líder del Partido Popular y de su equipo.
En el programa de Risto Mejide en Cuatro, Todo es Mentira, la gallega ve ya un posible destino para Pablo Casado en el caso en el que finalmente tenga que salir de Génova y no pueda continuar al frente de la presidencia del Partido Popular. Y es que Bescansa ha señalado una de esas opciones que siempre se dejan para aquellos políticos a los que la carrera política llega a su fin o se quieren alejar de la primera línea de la política española: Bruselas. Para Carolina Bescansa, a Casado “se le va a poner cara de eurodiputado”.
Acompañado de José Manuel García-Margallo, actual eurodiputado del PP y exministro de Exteriores en el primer Gobierno de Mariano Rajoy, la que fuera dirigente de Podemos le ha señalado al eurodiputado que tenga “cuidado” porque con el cambio en la dirección nacional del PP y el fin de Casado y Teodoro en Génova 13 “las listas a Europa van a estar más complicadas”.
“A mí me quedan dos años y medio”, ha dicho entre risas Margallo, que hay que recordar que se presentó al proceso de primarias para suceder a Mariano Rajoy y en el que finalmente fue elegido Pablo Casado. “Ahora hay un contingente de Génova que tendrá que aterrizar en algún lugar”, ha añadido Bescansa.
Ya con anteriordad, García-Margallo ha mostrado su apoyo a Ayuso y especialmente a Núñez Feijóo, del que se ha mostrado partidario, aunque también ha querido dejar claro que el cambio en el PP se tiene que hacer ordenado y sin dejar como víctima a Pablo Casado.
