Detención en un aeropuerto, polémicas actuaciones... la vida de escándalos de Diego 'El Cigala'

Este jueves Diego El Cigala copaba todos los titulares. El cantaor había sido detenido la noche del miércoles en Madrid por un presunto delito de violencia de género cometido en Jerez de la Frontera (Cádiz).

Esta no ha sido su primera detención ni su primer escándalo. El cantante de Lágrimas Negras ha protagonizado numerosos titulares, más allá de su extensa carrera musical. Con aproximadamente doce producciones discográficas que han recibido nominaciones a los Grammy y varios discos de platino, El Cigala ha sido un protagonista de polémicas casi constante.

En 2004 ya fue condenado por un delito de amenazas a una azafata por unos hechos sucedidos en 2003 en un vuelo con destino a Tenerife. Tras sentarse en su asiento, el cantaor se dirigió a la azafata y le dio una bolsa con un traje para que lo guardase. La empleada contestó que no había armarios y que lo podía colocar en el compartimento para equipaje sobre su asiento.

A esto, Diego Ramón Jiménez Salazar (nombre de pila del artista) respondió “en un tono tremendamente exaltado y agresivo” y empezó a insultar a la azafata. “Eres una guarra, tu cara no me gusta nada, te voy a sacar del avión con las piernas por delante, te vas a acordar de mí, me cago en ti y en los de tu raza”, le dijo, entre otras palabras.

Tras este incidente, la azafata se dirigió a la cabina para comunicárselo al comandante, no sin que antes el cantaor intentase agredirla. “Intentó dar un manotazo a la azafata por la espalda, lo que no consiguió al cerrar ésta rápidamente la puerta”, detalla la sentencia.

El comandante del avión llamó a la Guardia Civil del aeropuerto de Barajas, quienes obligaron a desembarcar al cantante. Entonces, tuvo que pagar 20 días de multa a razón de seis euros diarios, con 245 euros por los días que estuvo incapacitada para trabajar, además de 1.200 euros por las secuelas sufridas y 2.520 euros por los gastos médicos.

En otras ocasiones los escándalos se han producido en sus actuaciones. La más sonada fue en el festival Sonorama en 2018, cuando se subió al escenario tras más de media hora de retraso con una copa en la mano, de la que bebió toda la actuación.

La actuación dejó mucho que desear a los asistentes, que criticaron la poca seriedad del artista para subirse al escenario. Una escena que se ha repetido en otras actuaciones del cantaor. En 2015, una crónica del diario puertorriqueño El Nuevo Día, tachaba su actuación en San Juan (Puerto Rico) como un artista “bebido y errático”.

“Rayó en el irrespeto para un público que llenó el lugar y que lo fue abandonando de a poco ante la actitud que mostró el artista, quien no dejó de ingerir alcohol en toda la noche y en pleno show”, se podía leer en la nota.

Si hay algo que recuerde el gran público de Diego El Cigala son sus visitas al programa de Pablo Motos en Antena 3. Cada vez que El Cigala visitaba El Hormiguero, la audiencia crecía, y con ella también los comentarios sobre las locas intervenciones y teorías del cantante.

De ahí salieron el ”¿lo harás? ¡Atráas!” con la servilleta o sus reflexiones sobre el cocotal. “Estoy mu feliz, mu tranquilo... Muchas veces me siento como Tom Hanks en El Naufrago... Debajo de un cocotal. Lo que pasa que en el cocotal, las palmeracas son tan altas que tienes que tener cuidado, porque si te cae un coco, te parte el coco”, dijo en el programa.

En sus siguientes visitas —ya es invitado platino del programa— su testimonio no fue mucho más tranquilo. Entonces se inventó El cortarrollos, una broma que consistía en quedarse serio mirando a los presentes para desconcertarlos.

Entre otras llamativas polémicas del cantante está su última anécdota, un accidente el pasado mes de mayo cuando chocó con un coche fúnebre mientras circulaba por Puerto Rico. Aunque los vehículos implicados sufrieron desperfectos, no hubo que lamentar daños personales y todos sus ocupantes se encontraban en perfecto estado, tal y como confirmó su representante.