Una divulgadora científica aclara de una vez por todas quién tiene que usar la mascarilla FFP3
Boticaria García manda un rotundo mensaje sobre este tipo de mascarillas.
Parece que después de un año de pandemia todavía no está claro qué mascarillas hay que usar y qué utilidad tienen cada una de ellas.
Hace unas semanas, el director del CCAES, Fernando Simón, aseguró en rueda de prensa que si una persona se tiene que proteger a sí misma “lo más eficaz es una FFP3”.
Según la web del ministerio de Consumo hay dos tipos de FFP3: con válvula de exhalación y sin válvula de exhalación.
“La FFP2 es algo menos eficaz pero muy altamente eficaz, de sobra para la transmisión del coronavirus, si se mantienen el resto de medidas personales que se deben de aplicar”, señaló el epidemiólogo en rueda de prensa.
Estas declaraciones han creado una nueva histeria colectiva y, como ha contado la divulgadora científica Boticaria García en Zapeando, el programa que presenta Dani Mateo en laSexta, los ciudadanos han salido en masa a comprarlas.
La experta ha explicado de una vez por todas en qué casos habría que ponerse una mascarilla FFP3 y para ello ha puesto un ejemplo: “Esto es como si fuera obligatorio que todos los niños en las piscinas llevaran un flotador tipo salvavidas, como el del socorrista, en lugar de manguitos o flotadores”.
Por eso ha remarcado que “no es necesario usar una FFP3”. Pero, ¿quién sí debe usar este tipo de mascarilla?
“Los intensivistas en la UCI cuando van a intubar a un paciente que se sabe 100% que es positivo, ese paciente que está crítico con Covid está ahí con la boca abierta generando aerosoles y ahí sí, un intensivista se tiene que poner la FFP3 o el personal de enfermería si es que las tienen, que no siempre las tienen”, ha explicado Boticaria García.
La colaboradora de Zapeando ha querido mandar un mensaje a la población ante la “histeria colectiva” por este tipo de mascarillas: “Que no nos volvamos locos. En los hospitales en general si vais lo que usan son FFP2, los médicos incluso usan quirúrgicas si no están tratando directamente con pacientes Covid así que, muy importante, rotundamente NO necesitamos FFP3 para nuestra vida ordinaria. Cuestan entre 3 y 5 euros, hay una histeria colectiva, se han agotado en las farmacias, se ha disparado su precio y no merece la pena”.