Este verano ha llegado a las playas de Málaga un ejemplar de medusa, hasta ahora, no muy conocido. Así lo ha informado el portal web 101 TV. Se trata de la  medusa de barril (Rhizostoma luteum), a la que un usuario avisó desde su moto de agua en la playa de San Pedro de Alcántara. 

Una de sus características más llamativas de este tipo de animal es su tamaño. Los ejemplares adultos de este tipo concreto de medusa alcanzan los 60 centímetros de diámetro y, de peso, alrededor de los 40 kilogramos de peso. 

Desde el CSIC, la  investigadora Laura Prieto ha explicado que han "descubierto peculiaridades de esta especie que no comparte con otras medusas de su mismo género". 

"Por ejemplo, la madre medusa lleva a sus descendientes, denominados plánulas, protegidos entre sus brazos orales hasta que las libera en un ambiente propicio para que puedan encontrar un sustrato para transformarse en pólipo", ha añadido.

El sitio web 101 TV apunta que no se trata de un animal que ponga en peligro a las personas. En cualquier caso, sus picaduras sí que pueden tener un efecto urticante. En la piel suelen producir irritación y enrojecimiento, pero no muchas más complicaciones. 

Las recomendaciones ante el avistamiento de una de estas es la de salir del agua, para evitar una picadura. En caso de que eso suceda, instan a enjuagar la zona afectada con agua salada. A continuación, aconsejan retirar con pinzas los tentáculos si se han adherido a la piel. Y, finalmente, aplicar frío para reducir la inflamación.