Después de varios días de deliberación, un jurado ha declarado culpable a Harvey Weinstein de un cargo de agresión sexual en primer grado contra una antigua asistenta de producción, llamada Miriam Haley, que lo acusó de practicarle sexo oral a la fuerza en 2006. Podría enfrentarse a un máximo de 25 años de cárcel. 

El jurado, formado en su mayoría por mujeres, ha declarado no culpable al que fuera uno de los hombres más poderosos de la industria del cine del otro cargo de agresión sexual al que se enfrentaba tras la demanda de la modelo Kaja Sokola. 

Además, no han conseguido llegar a un acuerdo sobre el último cargo de violación en tercer grado contra Jessica Mann que se imputa a Weinstein en este juicio y tendrán que seguir deliberando. 

Este veredicto parcial llega después de largas semanas de juicio, que comenzó en abril, y en el que declararon las tres denunciantes. El jurado comenzó a deliberar el jueves pasado y este mismo lunes manifestaron al juez la intensa división que había entre las personas que lo forman y los problemas que estaban teniendo para alcanzar un veredicto. De hecho, pidieron una aclaración de las normas de deliberación. 

El exproductor de 73 años no testificó durante el juicio y solo se pronunció para agradecer el trato "increíblemente justo" del personas y las autoridades judiciales. Weinstein sí hizo declaraciones el pasado viernes en una entrevista con la cadena estadounidense Fox en la que insistió en que no había cometido ningún delito. 

"Me arrepiento de haber hecho pasar a mi familia por esto, de haber hecho pasar a mi esposa por esto, y de actuar inmoralmente", aseguró durante su intervención. 

Weinstein ya fue sentenciado hace cinco años en Nueva York a 23 años de prisión por las denuncias de dos mujeres, que también integran parte de la acusación en este proceso y aseguran que las agredió sexualmente en 2006 y 2013, pero esa condena fue revocada por un estrecho margen el año pasado en un tribunal de apelaciones alegando un error procesal.

Haley y Mann figuraban en el juicio original contra el magnate audiovisual, pero a este nuevo proceso se sumó Sokola, una mujer polaca que conoció a Weinstein cuando era modelo y que asegura también la obligó a practicarle sexo oral no consentido en 2006.

El que fuera cofundador de Miramax cumple otra condena 16 años de prisión por violación y agresión sexual en Los Ángeles desde 2022. Las acusaciones contra Weinstein, tanto de mujeres precarias de la industria del cine como de actriz conocidas Gwyneth Paltrow y Rose McGowan, propiciaron el nacimiento del movimiento #MeToo en 2017.

Un movimiento que nació para destapar el abuso de poder en Hollywood pero que terminó globalizándose y sirviendo para denunciar la violencia a la que se enfrentan las mujeres en todo tipo de ámbitos. 

Weinstein ha permanecido todo el juicio recluido en la prisión del hospital neoyorquino Bellevue debido a la leucemia y a los problemas cardíacos que padece y solo ha salido para asistir a las sesiones en los juzgados. 

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