Una farmacia de un pueblito de Guadalajara quiere sobrevivir y la ofrecen como una "ganga" para tener en cuenta
"Es un servicio muy necesario en un pueblo con el 80% de la población que es gente mayor".
Salmerón, en Guadalajara, busca la manera de volver a abrir su farmacia. El antiguo dueño de la misma paró de trabajar en la misma hace tres años por problemas de salud. El alcalde, Óscar Balcones, ha asegurado que, desde que asumió su cargo en 2023 se ha puesto manos a la obra para conseguir que esta vuelva a funcionar.
"Es un servicio muy necesario en un pueblo con el 80% de la población que es gente mayor", ha afirmado el edil en unas declaraciones para EFE que ha publicado Guadalajara Diario. Y la licencia de la farmacia, ahora, se traspasa a un precio, según el medio, "muy económico", 20.000 euros, y el local se alquila a 50 euros al mes.
Desde que cerró, y por el momento, la farmacia, ha sido la que hay en Valdeolivas la que ha abastecido a los de Salmerón. Desde el ayuntamiento de este último pueblo hablaron con el Colegio de Farmacéuticos y Delegación de Sanidad para encontrar una alternativa. Esta fue un botiquín temporal que llega desde Alcocer.
"El asunto está en que el botiquín viene media hora los miércoles de 15 a 15.30 horas y ya está y eso se queda muy corto", ha precisado Balcones. Además, ha precisado que les urge ese alquiler porque, en caso de que la licencia "vuelva al Colegio de Farmacéuticos si no la traspasa el pueblo se quedaría sin farmacia".
Según el medio esto sucede por la nueva normativa, que , precisa, no concede nuevas licencias de farmacia a los pueblos de menos de 500 habitantes. Salmerón tiene 150.
