Tras 7 meses sin depilarme, disfrutando de mis selvas negras, el tiempo empieza a apremiar. El verano se acerca. ¡Noooooooo! Empiezo a necesitar llevar faldas cortas y camisetas de tirantes. Empieza esa época en la que me debato entre mis deseos y necesidades y los de la sociedad.