"¿Se da usted cuen, don Gregorio? Toda la vida persiguiendo los garbanzos de uno en uno, rodando por tablaos de mala muerte hecho un fistro y con más agujeros en el diodeno que la ventana de un chérif".
"Me encargaré de que mi hijo siga teniendo como referente en la vida a su tío Angelito", ha escrito, junto a una imagen del pequeño Lucas con el piloto.
"119 años q nació Lorca. Y 81 q lo mataron a tiros y tiraron en un agujero como a otras 120000 personas. Sus asesinos tienen más calles q él", escribe el diputado.
Tenía 95 años. Su humildad y humanidad iban por delante de cualquier otra cosa. Pero el transcurrir del tiempo y la propia naturaleza han hecho que este asturiano, tan reconocido en la profesión cinematográfica, haya dejado de existir. Pero este empeño desgarrador de la vida no podrá arrancar a su familia y amigos su recuerdo disfrutando de sus películas.
Brujo, tenebroso, bronco, irascible, genial y estrafalario. Él mismo dijo en una ocasión sin modestia en una recepción en la Casa Blanca que "había cambiado el destino de la música cinco o seis veces". Pensaba que la música que no avanza está muerta. Y acabó tocando el silencio. Pero en el fondo era un sonido de dolor, un pozo melancólico de su alma enferma. Era el jazz en toda su extensión.